B.N. | 14-06-2017
La imagen de la Virgen a su llegada a Sagunto. (Foto: M.Guallart)“Primero la visita del Arzobispo y ahora esto. Si es que aquí o no pasa nada en mucho o tiempo o lo tenemos todo a la vez”, comentaba jocosa una vecina de Sa­gunto en relación a la reciente visita pastoral y a la llegada de la Virgen de los Desamparados a la localidad tras 25 años de su última visita.
“Mira que es bonica… ¡guapa!”, exclamaba una vecina emocionada al ver llegar a la imagen procesional de la Mare de Déu al parque Terraet de la Glorieta de Sagunto. Allí era colocada en el altar creado para la misa de campaña presidida por el vicario general de la diócesis de Valencia, Vicente Fontestad.
Tras finalizar la misa, la Mare de Déu recorría las calles del casco histórico de Sagunto pasando ante la parroquia de Santa María y por el Camí Real hasta Nuestra Señora del Buen Suceso donde era recibi­da con un gran castillo de fuegos ar­tificiales.
Mientras, a sus puertas le aguar­daba buena parte de la feligresía. Más tar­de, se celebró una vigilia diocesana de la Adoración Nocturna seguida por la Ex­posición del Santísimo y el rezo del Ro­sario.
Al día siguiente, la parroquia acogió la celebración de dos misa, una matinal y otra vespertina con la administración del sacramento de la unción a enfermos y mayores. Momento que era aprovechado por muchos devotos para visitar a la Mare de Déu. Ya por la tarde, la imagen peregrina, procesionaba, durante más de tres horas, desde la parroquia hasta el Convento de las Servitas acompañada por los sones de la Sociedad Musical Lira Saguntina.
Allí en el mismo convento, tuvo lugar una ofrenda floral y la recogida de alimentos y ropa, a beneficio de Cáritas. Ya el domingo, y tras el rezo del Rosario de la Aurora, se celebró el pasar de niños y niñas por su manto, antes y después de misa general en la parroquia para, ya por la tarde, ser trasladada a la parroquia del Salvador desde donde se despidió del pueblo saguntino para emprender camino hacia Valencia.