Los fieles de Bocairent, durante las tareas de reforestación.


En la parte final de las reuniones  mensuales de los grupos del Itineario Diocesano de Renovación (IDR), sus integrantes establecen algún compromiso en función, por lo general, de las ideas que se han desarrollado en los temas reflejados en los manuales editados por la Vicaría de Evangelización. Visitar ancianos, establecer una oración común para rezarla a diario… y también acciones de corte ecológico, como ayudar a reforestar un bosque quemado.
Ese es el caso de un grupo del IDR de la parroquia Asunción de Nuestra Señora de Bocairent. Hace unas semanas, sus miembros organizaron una pequeña reforestación de una de las parcelas quemadas en el terrible incendió que sufrió la zona en septiembre de 2010.
La iniciativa surgió en el transcurso de la reunión en la que se trabajaron los temas 1 y 2 del nuevo ciclo del IDR, que tratan sobre la Creación como obra del amor de Dios.
Para llevar a la práctica la enseñanza del Génesis y del Evangelio en cuanto a que Dios ha confiado al ser humano la Creación y somos responsables ante Él del mundo, los  integrantes del grupo tuvieron la idea de plantar unos cuantos árboles de pequeño tamaño, que con el paso de los años irán creciendo.
En total fueron 24 árboles los que se plantaron. Concretamente, 11 carrascas (encinas), 7 pinos y 6 robles en una parcela parroquial que sufrió las consecuencias del devastador incendio que calcinó las sierras de Bocairent, Ontinyent, Agullent y otras localidades.