B.N. | 13-09-2018
Los once nuevos seminaristas. (FOTO: J.PEIRÓ)El Seminario Menor de la diócesis de Valencia celebró en su sede en Xàtiva la apertura solemne de curso 2018-2019 con el ingreso de 11 nuevos seminaristas -que se suman a los 20 actuales con edades comprendidas entre los 11 y los 19 años – en una misa presidida por el cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares.
El Cardenal agradeció a los seminaristas, que estuvieron acompañados y arropados por sus familias, amigos y hermanos de sus comunidades parroquiales “este paso tan importante que dais adelante para aceptar la amistad de Jesús y dejaros acompañar por Él, que lo da todo y lo pide todo”.
“El Señor está con vosotros, no tengáis miedo, mirad y experimentad cómo os quiere Él, con ese regalo de su llamada para iniciar este tiempo precioso de formación y discernimiento en el Seminario Menor”, les dijo el Cardenal, que también les recordó que “hacen falta hoy sacerdotes para anunciar a Jesucristo y hacerlo descubrir a quienes no le conocen”.
Igualmente agradeció a las familias de los nuevos seminaristas su disponibilidad. “Gracias, porque Dios también os ha bendecido”, indicó el Cardenal que igualmente expresó su gratitud a los sacerdotes de las parroquias de las que procedían los nuevos seminaristas y que concelebraron en la eucaristía.
En la celebración se realizaron dos importantes ritos. El primero, el de ‘Acogida’ de los 11 chicos que se incorporan a la comunidad del Seminario Menor quienes, delante de todos los presente “manifestaron su compromiso de cuidar y acrecentar el regalo de la vocación, recibiendo de manos del Arzobispo el proyecto educativo que marca la vida del seminario”, explica el rector del Seminario Menor, Pablo Valls.
“A pesar de su edad, con fuertes voces mostraron su deseo de conocer más al Señor, dejarse acompañar por la Iglesia y ayudar al Arzobispo en la misión de proponer a otros jóvenes la vocación sacerdotal”, recuerda.
A continuación tuvo lugar el rito del ‘Paso al Mayor’, realizado por Toni Salord y José Gabriel Mateu, dos seminaristas que han finalizado su proceso formativo en el Seminario Menor. Tras dar testimonio público de lo que Dios ha ido haciendo en ellos estos años de formación recibieron la bendición del Cardenal.
“Ha sido un regalo poder ver en una misma celebración las primicias vocacionales que el Señor ha suscitado entre los pequeños que se incorporan al Menor, y aquellos que como frutos maduros han finalizo su proceso formativo en él”, comenta Valls.
Un día emotivo con un inicio de curso ilusionante con “deseos de crecer en gracia, sabiduría y estatura ante Dios y los hombres”, concluye el rector.