El papa Francisco ha deplorado los últimos ataques terroristas perpetrados por radicales yihdistas en Londres y Kabul, que han causado hasta el momento cerca de 90 muertos y centenares de heridos.
Luego de la misa por la solemnidad de Pentecostés que presidió en la plaza de San Pedro, el Papa rezó el ‘Regina Coeli’ y condenó el brutal ataque terrorista islamista de Londres en el que murieron siete personas el pasado día 3.
“Que el Espíritu Santo done paz al mundo entero; sane las plagas de la guerra y del terrorismo, que también esta noche, en Londres, ha golpeado a personas inocentes: oremos por las víctimas y sus familiares”.
En la noche de ese sábado, una furgoneta se lanzó a más de ochenta kilómetros por hora sobre un grupo de viandantes en una popular zona de bares y restaurantes. Tres hombres salieron del interior del vehículo, armados con cuchillos y con chalecos ‘suicidas’ que resultaron ser falsos. Los terroristas atacaron con los cuchillos a decenas de personas a la entrada de los bares y de los pubs, de camino hacia una de las zonas más conocidas y en la que se concentra más gente en la noche, Market. La policía evacuó la zona y acorraló a los terroristas y disparó contra ellos.
Scotland Yard –la policía británica–, ha confirmado ya siete víctimas mortales y 48 heridos junto a los tres terroristas.
Reino Unido se encuentra en máxima alerta, al igual que la mayoría de países de Europa.
Asimismo, el Papa manifestó sus condolencias por el ataque terrorista en Kabul (Afganistán) que ha provocado ya la muerte de al menos 80 personas y causado 350 heridos.
En un comunicado enviado por el secretario de Estado Vaticano, el cardenal Pietro Parolin, el Santo Padre afirma que “al conocer la triste noticia del ataque aberrante en Kabul y los muchos muertos y graves heridos que ha provocado, el Papa Francisco expresa su más sentido pésame a todos los afectados por este acto brutal de violencia”.
“Su Santidad encomienda las almas de los difuntos a la misericordia del Todopoderoso, y asegura al pueblo de Afganistán sus continuas oraciones por la paz”.
El 31 de mayo explotó un camión bomba en la capital afgana, en una zona en la que están alojadas embajadas de diversos países entre ellos de Alemania, Francia y China.