B.N. 30-11-2016

Este año la vigilia de la Inmaculada tendrá muy presente las Jornadas  Mundiales de la Juventud, ya que girará en torno al lema ‘El Todopoderoso ha hecho cosas grandes en mí’ (Lc 1, 49), escogido por el Papa para el próximo año 2017 y que se enmarca dentro del itinerario de tres años que acompañan a la JMJ, como ya se hizo con la pasada jornada celebrada en Cracovia. De esta manera, la tradicional vigilia en la víspera de la solemnidad de la Inmaculada del próximo miércoles, 7 de diciembre, en la Basílica de la Virgen de los Desamparados de Valencia se une a las indicaciones del Santo Padre y dará a conocer a los jóvenes de la diócesis la reflexión para este año que empieza sobre la Virgen María.
Además, en la vigilia de este año participarán jóvenes procedentes de parroquias y colegios y de los movimientos juveniles presentes en nuestra diócesis que, tras la celebración de la Palabra, están invitados a tomar un chocolate caliente en la iglesia de San Lorenzo tal y como informa la delegación de Infancia y Juventud del Arzobispado de Valencia, organizadora de la celebración que será a las 22 horas y estará presidida por el cardenal arzobispo de Valencia Antonio Cañizares.

La Virgen María en el centro de la JMJ

La Virgen María estará en el centro de la reflexión de las próximas Jornadas Mundiales de la Juventud. Así lo ha decidido el papa Francisco. Si la del 2017 lleva por lema ‘El Todopoderoso ha hecho cosas grandes en mí’, para el 2018 será ‘No temas, María, porque has hallado gracia delante de Dios’. Finalmente, la JMJ de Panamá en el año 2019 llevará como lema ‘He aquí la sierva del Señor; hágase en mí según tu palabra’. De esta manera el camino espiritual indicado por el Papa continúa la reflexión iniciada con las últimas tres Jornadas Mundiales de la Juventud (2014-2016), centradas en las Bienaventuranzas.
Ya Francisco, en su discurso preparado para el encuentro con los voluntarios de la última  JMJ de Cracovia, ilustraba las actitudes de la Madre de Jesús, mostrándola como modelo a imitar. Hablando después espontáneamente en aquella ocasión, el Santo Padre invitó a los jóvenes a tener memoria del pasado, tener valentía en el presente y tener/ser esperanza para el futuro. Así se explica que los tres temas anunciados tienden a dar al itinerario espiritual de las próximas Jornada Mundiales de la Juventud una fuerte connotación mariana, subrayando al mismo tiempo la imagen de una juventud en camino entre el pasado (2017), el presente (2018) y el futuro (2019), animada por las tres virtudes teologales que son la fe, la caridad y la esperanza.
Este camino propuesto a los jóvenes muestra también una clara sintonía con la reflexión que el papa Francisco ha encomendado al próximo Sínodo de los Obispos que se celebrará en  2018 y cuyo lema es  ‘Los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional’.