L.B. | 27-07-2014
En la misa en la catedral participaron, junto con los Camilos, capellanes de hospital y agentes de pastoral de la Salud. J.PEIRÓ
El lunes 14 de julio se cerró en Roma el año jubilar camiliano, que durante ha venido celebrándose con ocasión del 400 aniversario de la muerte del fundador de la congregación de los religiosos camilos, san Camilo de Lelis. Con este motivo, la familia camiliana estuvo presente en la plaza de San Pedro, de Roma, para participar en el Ángelus con el papa Francisco.
En Valencia, el arzobispo clausuró el cuarto centenario el pasado domingo 20, con una misa en la Catedral.
En la eucaristía, que presidió don Carlos, participaron también capellanes de hospital y agentes de pastoral de la salud al considerarse a san Camilo también como el iniciador de la pastoral de la salud.
Con motivo del aniversario de su fundador este año se ha podido obtener la indulgencia plenaria en todas las capillas regidas por los Camilos.
Servir a los enfermos
La orden de los Clérigos Regulares Ministros de los Enfermos o Religiosos Camilos fue fundada el 14 de agosto de 1582 en Roma, por san Camilo de Lelis (1550-1614).
Camilo de Lelis, enfermo desde muy joven, vivió y sufrió las deficiencias del hospital de tradición medieval. Para ponerles remedio decidió fundar una orden hospitalaria integrada por “hombres piadosos y buenos” que sirvieran a los enfermos voluntariamente y por amor de Dios, “con el mismo amor que tiene una madre a su único hijo enfermo”.
Su finalidad es la consagración al servicio de los enfermos, incluso con riesgo de la propia vida, y testimoniar el amor siempre presente de Cristo a los enfermos.
El hábito propio de la orden es negro con una cruz roja en el pecho, signo que indica a Cristo sufriente en la persona del enfermo.
En Valencia, los Camilos han dirigido la capellanía del Hospital de la antigua Fe del barrio de Campanar desde su fundación en 1968 y del nuevo centro desde su inauguración.