REDACCIÓN | 16-11-2018

Un año más, como es habitual, los alcudianos residentes en Valencia celebraron la fiesta a su patrona, la Virgen del Oreto, muy querida y nunca olvidada por los mismos, ya que es mucha la devoción que le profesan.
La imagen de la Virgen, cada año, el tercer domingo de octubre, desde su altar, donde fue entronizada en el año 1955, es trasladada para presidir en el altar mayor de la parroquia de Santo Tomas Apóstol y San Felipe Neri de Valencia, donde se celebra la santa misa. Este año fue presidida por el párroco, Ramón Crespo, quien resaltó en su homilía los fines con que se formó la Colonia Alcudiana en Valencia, profundizando sobre todo en el reglamento de la asociación, esto es, el honrar a su patrona.
Finalizada la Santa Misa, todos los alcudianos se reunieron en los salones de la parroquia para estrechar las relaciones religiosas y sociales entre ellos. También se realizó el sorteo de la “mida” (medida de la virgen con su imagen pintada y bordada), muy apreciada por los alcudianos, que tocó este año a la familia Oliver-Abel. Al final se cantó el himno de la Colonia a su patrona.