AVAN | 01-07-2015

Saludo entre el Papa y el cardenal Cañizares el pasado lunes en el Vaticano. Foto: L’OSSERVATORE ROMANO


El papa Francisco entregó el lunes, 29 de junio, al cardenal Antonio Cañizares el palio como arzobispo metropolitano de Valencia tras la eucaristía en honor de san Pedro y san Pablo, cuya solemnidad litúrgica se celebró ese día en la Basílica de San Pedro del Vaticano.
La entrega del palio tuvo lugar en un acto privado, después de la modificación introducida por Francisco el pasado enero para sustituir el procedimiento anterior, que consistía en la imposición oficial del palio, en la misa de los santos Pedro y Pablo, en un rito en el que los nuevos arzobispos nombrados en el último año acudían delante del Pontífice, se arrodillaban ante él y recibían el palio, uno a uno.
Ahora, según el nuevo procedimiento, los nuevos arzobispos que concelebran con el Papa “reciben el palio después de una eucaristía, en privado, de manos del Pontífice, mientras que la imposición se realiza, más adelante, en sus diócesis de origen por parte de los nuncios apostólicos, en calidad de representantes del Papa”, según ha explicado monseñor Vicente Cárcel, vicario episcopal de los sacerdotes valencianos residentes en Roma.
El palio, que simboliza la unión de los arzobispos metropolitanos con el Papa, es una cinta o banda de lana blanca que se coloca sobre la casulla y que rodea los hombros, en forma de collarín, con dos apéndices que caen sobre el pecho y la espalda. Incorpora, además, seis cruces negras bordadas, una en cada hombro, dos más por delante y otras dos por detrás. Además, los palios no se imponen a la persona, sino que lo reciben como arzobispos metropolitanos y lo utilizan mientras ejercen como tales.
De ese modo, el cardenal Cañizares ha utilizado un palio como arzobispo de Granada, otro como arzobispo de Toledo y Primado de España, que dejó de usar en 2008 cuando fue nombrado prefecto de la Congregación Vaticana para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos.
El cardenal Cañizares, que fue nombrado arzobispo de Valencia por el Papa Francisco el pasado 28 de agosto, empezará a usar el palio que le entregue el Pontífice “tras la imposición por parte del Nuncio” en una celebración que tendrá lugar en Valencia en fecha aún por determinar.