M.L. Vives | 08-06-2017
El movimiento ‘Fe y Luz’, formado por personas con discapacidad mental, sus familias y amigos, cumple este año su 30 aniversario de presencia en VAlencia. ‘Fe y Luz’ está integrado por comunidades de encuentro formadas por personas con discapacidad mental, familias y amigos, en especial jóvenes, que se reúnen con regularidad y desde una perspectiva cristiana, para compartir su amistad, rezar juntos, festejar y celebrar la vida.
En Valencia cuenta con dos comunidades, ‘Doble Amor’ y ‘Puerta del Cielo’ en las que participan cerca de 60 personas. Según es habitual en ‘Fe y Luz’ cuando una comunidad llega a 40 personas se divide para que la atención y la relación entre todos sea lo más directa posible. La primera fue ‘Doble Amor’ y de ella surgió ‘Puerta del Cielo’ que se encuentra en formación para poder constituirse como comunidad.
A ‘Doble Amor’ pertenece Elia Martínez, de 74 años y vecina de Albuixech, que encontró en ‘Fe y Luz’ “una señal de Dios porque le pedí que me iluminara para poder hacerme cargo de mis dos hijas”.
Una vez al mes Elia, su marido y su hija Elena se reúnen en la parroquia Nuestra Señora de la Esperanza de Valencia en ‘Doble Amor’ con otras familias. Durante este encuentro celebran una misa, comparten la comida y mantienen un momento de conversación sobre temas diferentes. Los temas a tratar van marcados por el carnet de ruta del movimiento y entre ellos figuran “¿Quién me enseñará lo que le agrada a Dios?” o “Jesús, confío en ti”.
También organizan campamentos en vacaciones que cuentan con la colaboración de voluntarios, retiros espirituales para las familias, peregrinaciones, talleres de oración y manualidades como fabricación de instrumentos como el tambor o la flauta.
“A nosotros ‘Fe y Luz’ nos ha aportado una familia que nos es de sangre ni de carne pero es fe fe, de amistad, de estar en el mismo barco, y de ahí el emblema del movimiento”, asegura Elia.
‘Fe y Luz’ considera que la persona con discapacidad, débil y dependiente, puede convertirse en fuente de unidad en la sociedad y en la Iglesia.
Además, para Elia, una de las cosas que más le han ayudado del movimiento es “hablar el mismo lenguaje, estar juntos y que los comporamientos de tu hija no le extrañen a los demás porque también pasan o han pasado por los mismo”.
‘Fe y Luz’ fue fundado con la convicción de que toda persona que tiene una limitación es una persona con sentido pleno, con todos los derechos del ser humano y deben recibir los sacramentos, catequesis y acompañamiento espiritual.
“Cuando mi hija era pequeña la tuvieron que ingresar en la UCI, nosotros la dejamos allí y cuando al día siguiente volvimos para verla y yo pensaba que estábamos solos, nos encontramos a ‘Fe y Luz’ esperándonos”, explica Elia.
Para padres de personas con discapacidad ‘Fe y Luz’ aporta un apoyo en sus dificultades y les ayuda a percibir claramente la belleza interior de su hijo. “El mundo de la discapacidad repele y cuando alguien se atreve a tratarlos, ¡enamora!”, afirma Elia.
Sin embargo, ‘Fe y Luz’ no solo ayuda a personas con discapacidad y familiares, sino también a aquellas que desean participar en ella ya que les abre un camino de amistad y compromiso, invitándoles a un mundo de ternura, fidelidad, escucha y fe.
Orígenes del movimiento
En1968, en Francia y para responder a la llamada de los padres de niños que tenían discapacidad mental, Jean Vanier y Marie Hélène Mathieu organizan una peregrinación a Lourdes. Fueron tres años de preparación de reacciones, entusiasmo y reserva. En 1971, por Pascua, 12 mil peregrinos de 15 países, entre ellos, cuatro mil con discapacitad mental, acompañadas por padres y amigos, especialmente jóvenes, peregrinan a Lourdes. Debido al éxito de esta iniciativa siguen reuniéndose en comunidades. Así nació Fe y Luz.
En 1975 el papa Pablo VI acoge ‘Fe y Luz’ en la Basílica de San Pedro y seis años más tarde, comunidades de ‘Fe y Luz’, provenientes de 23 países, vuelven a Lourdes para dar gracias.
En Valencia el movimiento llegó en 1987 y uno de sus primeros lugares de encuentro fue el Colegio del Pilar. Actualmente ‘Fe y Luz’ está presente en 79 países y cuenta con 1648 comunidades.