REDACCIÓN | 9-03-2018
Instantánea del acto en la parroquia de Ntra. Sra. de los Ángeles, ante el Santísimo Cristo del Salvador. M.GUALLART
“La Semana Santa Marinera es una manifestación extraordinaria de nuestra historia y de nuestra historia cristiana en la que “contemplamos el misterio del amor de Dios”. Con estas palabras el obispo auxiliar de Valencia Mons. Arturo Ros destacó la importancia de la Semana Santa de los barrios marítimos de la ciudad de Valencia en el pregón de la celebración de este año. En este acto, al que también asistió el arzobispo de Valencia, el cardenal Antonio Cañizares, hizo un llamamiento a todas las cofradías, hermandades y corporaciones a “no olvidar que somos herederos de este hermoso legado y responsables de transmitirlo con fidelidad inquebrantable”.
En una celebración que estuvo presidida por el Santísimo Cristo del Salvador en la parroquia Nuestra Señora de los Ángeles del Cabanyal, completamente llena, monseñor Arturo Ros defendió que “las formas propias de la religiosidad popular han brotado de la encarnación de la fe cristiana en la cultura popular” y, por eso, “incluyen una relación personal con Dios, con Jesucristo, y con María, que tienen carne y tienen rostros”.
Más adelante, destacó que “en la piedad popular, por ser fruto del Evangelio, subyace una fuerza activamente evangelizadora que no podemos menospreciar, porque sería desconocer la obra del Espíritu Santo”. En consecuencia, “estamos llamados a alentar y fortalecer esa fuerza evangelizadora para profundizar el proceso de inculturización que es una realidad nunca acabada”. Además, las expresiones de piedad popular “tienen mucho que enseñarnos y, para quien sabe leerlas, son un lugar teológico al que hemos de prestar atención a la hora de plantear la nueva evangelización”.
Finalmente, culminó sus palabras monseñor Arturo Ros asegurando que “éste es el tiempo de la misericordia, para todos y cada uno, para que nadie piense que está fuera de la cercanía de Dios, para que los pobres sientan la mirada de respeto y atención de aquellos que, venciendo la indiferencia, han descubierto lo que es fundamental en su vida”.
Tras el pregón de su obispo auxiliar, el Arzobispo alentó a “acoger de verdad las palabras de Monseñor Ros, porque eso es la Semana Santa, abrir nuestro corazón al amor inmenso que Dios nos tiene, acoger a ese Jesús que es Hijo de Dios hecho hombre que ha compartido con nosotros todo”. Y alentó a “vivirla con esa fe que nos anima y da esperanza y con el ánimo para seguir transformando este mundo nuestro, que tanto lo necesita, con el amor que brota de la Cruz”.
Por su parte, el presidente de la Junta Mayor de la Semana Santa Marinera, Francisco Carles Salvador, que presentó al pregonero, destacó al término del acto que “la Semana Santa Marinera, para los que vivimos en estos barrios, es una manifestación religiosa y popular que, además de formar parte de nuestras vidas, la celebramos las 52 semanas del año, ayudando en Cáritas, como preparadores catequistas, mediante la Escuela Cofrade o con voluntariado en asociaciones sin ánimo de lucro”.