L.B. | 4-10-2018
Ricardo Soriano, presidente del Centro Aragonés. (FOTO: ALBERTO SÁIZ)El sábado 12 de octubre de 1918, día de la virgen del Pilar, se inauguró el Centro Aragonés en Valencia. Cien años después, la entidad sigue plenamente activa y son numerosas las actividades culturales que lleva a cabo en su edificio de la calle Don Juan de Austria, en pleno centro de Valencia. Este año, a los festejos propios de la fiestas en honor de la Virgen del Pilar, se unen los conmemorativos del centenario, que han venido desarrollándose prácticamente desde hace un año.
El presidente del Centro Aragonés, Ricardo Soriano, turolense afincado en Valencia, explica que, aunque el origen del Centro como tal data de 1918, se tienen vestigios de la participación en los juegos florales de 1895 de lo que entonces se llamaba ‘Círculo Aragonés’. No obstante, “el 29 de abril de 1918 la colonia aragonesa, que entonces era muy numerosa, decidió poner en marcha lo que finalmente y desde hace 100 años se conoce como Centro Aragonés de Valencia”, añade. Puesta en marcha que se solemnizó el 12 de octubre de ese mismo año.
En la actualidad, los aragoneses afincados en Valencia y provincia sigue siendo un grupo muy numeroso. Y aunque cada vez “afortunadamente la migración hacia la comunidad es menor”, tal como destaca Soriano, hay muchos aragoneses residentes en Valencia por motivos de estudios. Ciertamente, no todos los que finalizan sus estudios se quedan, pero la cercanía de Valencia hace que muchos aragoneses tengan su segunda residencia en zonas costeras, principalmente en la parte norte de Valencia y Castellón.
Toda la familia
Por ello, no es raro que el Centro Aragonés, cuente actualmente con alrededor de 500 socios. “Aunque más que hablar de socios, hay que hablar de familias”. Porque, efectivamente, familias completas participan en las actividades del Centro. Actividades que en su gran mayoría son culturales, principalmente de folclore aragonés, con una rondalla de canto y baile de ‘jotas’. Además, el Centro cuenta con una coral, bailes de salón, teatro, clases de informática, de inglés y de corte y confección, así como una escuela de arte donde se estudia interpretación, canto y baile. A lo largo del año, la entidad organiza también exposiciones y conferencias así como viajes turísticos. “También contamos con una peña de fútbol formada por seguidores del Zaragoza, la ‘Peña zaragocista’ y otra peña de jotas, ‘El cachirulo”.
Aunque las actividades están reservadas a los socios y familia, cualquier persona puede participar en las exposiciones de pintura, fotografía, escultura, rastrillo, etc. También en las conferencias y charlas que a lo largo del año ofrece el Centro, especialmente en las semanas culturales de San Jorge y el Pilar. “Cualquiera puede ser socio independientemente de su lugar de nacimiento, solamente tienen que solicitarlo en secretaría y se incorpora a la asociación en igualdad de condiciones que los demás”, matiza Ricardo Soriano.
Con motivo de su centenario, el Centro Aragonés de Valencia ha editado el libro ‘Aragón en Valencia, 100 años del Centro Aragonés de Valencia’, que recoge la historia de los aragoneses en la capital del Turia y que ya ha sido presentado en Zaragoza, Huesca, y Teruel. Además, para conmemorar sus cien años, se ha realizado un festival con el Cuadro de Jotas de la casa. Y concluirá la celebración del centenario con un Gran Festival en Valencia, a final de año.
Devoción a la Virgen
“La devoción de los aragoneses a la Virgen del Pilar es más que palpable”, indica el presidente del Centro. “Sólo hay que visitar la iglesia del Pilar para comprobarlo, y no sólo en los eventos señalados, sino que los aragoneses acuden ante su altar en cualquier ocasión”, subraya. De ahí que, junto con las numerosas actividades culturales, el Centro Aragonés también organice actividades de carácter religioso.
Entre todas destacan las fiestas del Pilar, que este año se iniciaron el día 27 de septiembre con la presentación de la revista que editan todos los años, ‘Presencia Aragonesa’, continuando con una conferencia sobre los bienes de Sijena y finalizará el día 26 de octubre con la obra de teatro ‘Cosas normales de gente normal’.
“Además de nuestras propias actividades, participamos en los actos de las otras casas regionales de Valencia, de casales falleros o en la batalla de flores. Y, por supuesto, en actos religiosos como la ofrenda de flores a la Virgen de los Desamparados, y en diversas procesiones, rastrillos de Navidad, etc”, añade Ricardo Soriano.