DAVID AMAT | 13.05.2021
La Universidad Católica de Valencia (UCV) ha presentado en el Campus de Valencia-San Carlos, las mascarillas FFPCOVID MASK creadas por Visormed-UCV Research, que son capaces de inactivar el SARS-CoV-2 y otros virus con envoltura como la gripe en menos de un minuto, así como bacterias multirresistentes.
Desarrolladas junto a la empresa alicantina Visor Medical, que las ha fabricado y comercializará, estas mascarillas se han creado gracias a la investigación realizada desde el inicio de la pandemia por el Laboratorio de Biomateriales y Bioingeniería de la UCV, liderado por el profesor Ángel Serrano. Los investigadores de este laboratorio -perteneciente al Centro de Investigación Traslacional San Alberto Magno (CITSAM) de la UCV- han conseguido desarrollar filtros inteligentes con la capacidad de inactivación, que poseen ahora estas mascarillas.
Esta nueva tecnología sanitaria supone “un paso adelante” en la protección frente a la pandemia, dado que las mascarillas convencionales que usa ahora la población “no tienen capacidad antimicrobiana, y sólo impiden que el virus llegue a las vías respiratorias”, según ha apuntado el propio Serrano: “Quisimos ir más allá y desarrollar una mascarilla que, además, tuviera la capacidad de destruir el virus en cuanto entrara en contacto con el tejido. Vimos también que nuestro filtro era efectivo contra bacterias muy resistentes, que no pueden destruirse con antibióticos y suponen una amenaza sobre todo para el personal sanitario”.
“Además, estas mascarillas tienen la ventaja de proteger en dos direcciones: a las personas sanas de no infectarse y a las personas infectadas porque no emiten tantos virus activos. También tiene la ventaja de que, como inactivamos la mayoría de microorganismos que expulsamos al hablar es una tecnología que produce muchos menos residuos infecciosos”, ha añadido.
BACTERIAS MULTIRRESISTENTES: AMENAZA PRESENTE Y FUTURA
Las FFPCOVID MASK, un producto totalmente valenciano, no sólo servirán para el combate actual contra la covid-19, o contra virus como la gripe, también serán útiles como protección frente a las bacterias multirresistentes, que no pueden ser destruidas con antibióticos y constituyen un gran riesgo para la salud mundial en el presente y el futuro. La Organización Mundial de la Salud, de hecho, ha estimado que para el año 2050 “es muy probable que haya más fallecimientos por infecciones con bacterias de este tipo que incluso por cáncer”, según ha apuntado Serrano.
“Nuestro objetivo ha sido siempre poder desarrollar materiales sanitarios a coste muy bajo para poder llegar a toda la sociedad en esta situación de emergencia. Y con esa idea estuvimos trabajando desde el principio de la pandemia, que, además, afectó a familiares directos. Decidimos abandonar muchas de las líneas de investigación que teníamos en marcha y nos centramos en luchar contra el SARS-Cov-2”, ha explicado Serrano.
En ese sentido, el investigador de la UCV ha querido ensalzar la figura de los investigadores: “Hoy es un gran día para nuestro grupo. Ha sido un trabajo de investigación puro, con muchas horas de laboratorio, de ordenador, incluidos fines de semana. Ver hoy que este esfuerzo se materializa en una transferencia de la investigación a la sociedad resulta muy gratificante”.
ARTEAGA: “NUESTRO EMPEÑO ERA QUE ESTAS MASCARILLAS ESTUVIESEN AL ALCANCE DE TODOS”
El vicerrector de investigación de la UCV y director ejecutivo del CITSAM, Francisco Arteaga, ha remarcado que la apuesta por llevar el fruto de la investigación universitaria a la sociedad requería “de buscar un socio empresarial, algo que fue difícil para nosotros”. Según ha asegurado Arteaga, la UCV buscaba una empresa que compartiera sus “valores de responsabilidad social”, por lo que no podían “simplemente licenciar el producto”.
Para Arteaga, esa obligación ética era un “reto adicional”, que se ha conseguido superar con la empresa valenciana: “Es una satisfacción ver que ha existido desde el principio un empeño compartido por ambas entidades de crear y hacer llegar tecnología sanitaria asequible a toda la población. Nosotros somos la universidad privada con la matrícula más barata y nos importaba mucho que estas mascarillas fuesen un producto al alcance de todos”.
“Cuando los investigadores de la Universidad hacen su trabajo, nos toca a los administradores, en este caso al Vicerrectorado de Investigación, estar a la altura. Y cuando el trabajo, como sucede en este caso, tiene un alto valor traslacional debemos llegar a la empresa, porque nuestros descubrimientos tienen que llegar a la sociedad”, ha expuesto Arteaga.
Así, Arteaga se ha mostrado “convencido” de que la asociación entre UCV y Visor Medical será “muy fructífera” para ambas instituciones, pero “sobre todo” para la sociedad: “Juntar el conocimiento científico y la capacidad industrial es una apuesta ganadora segura. Encontrar esas sinergias, pero sobre todo esa sintonía, ese espacio de diálogo franco, buscando objetivos comunes, es clave”.
SORIANO: “ES UN PRODUCTO REVOLUCIONARIO PUESTO AL SERVICIO DE LA SOCIEDAD”
Por otro lado, el director comercial de Visor Medical, José Antonio Soriano, ha asegurado en su intervención en el acto que ambas UCV y Visormed alcanzaron un acuerdo de colaboración “desde el primer día” porque ambas entidades compartían una misma idea: “Se trataba de un producto revolucionario pero que tenía que ponerse al servicio de la sociedad, pensando en aquellos que han sufrido más la crisis de la pandemia, incluidos los sanitarios y toda la población civil”.
“No han pasado ni tres meses y hemos sido capaces de poner en marcha ya un proyecto con una serie de complejidades técnicas resueltas en tiempo récord. Este es un logro de la unión entre universidad y empresa, y nos sentimos tremendamente orgullosos de este trabajo que hemos hecho con una grandísima institución como la Universidad Católica de Valencia”, ha aducido.
En el acto ha participado también el director general de Investigación y Alta Inspección Sanitaria de la Conselleria de Sanidad, Javier Burgos.