La Asociación Valenciana para la Defensa de la Vida, Provida Valencia, nació en el año 1979 con el único propósito de defender la vida humana desde su concepción hasta la muerte natural. La ayuda que a lo largo de estos 44 años han brindado a mujeres embarazadas en riesgo de exclusión social y en riesgo de aborto se transforma ahora en miles de gracias de madres que, sin ellas, no hubieran podido salir adelante.
❐ BELÉN NAVA | 23.03.2023
“Conocí a Provida en el momento más difícil de mi vida. Estaba embarazada de 5 meses, y mi pareja me había dejado, porque él no quería tener un bebé en ese momento, su opción era abortar, pero yo no quería hacerlo, pues valoraba mucho la vida que tenía dentro de mí”. Es el testimonio en primera persona de María Goretti, una mujer procedente de la India y a la que Asociación Valenciana para la Defensa de la Vida le cambió la vida por completo, valga la redundancia.
El embarazo de María no le permitía trabajar. En una país extraño y sin ningún familiar al que recurrir, se vio sola y sin ningún tipo de poyo. Fue a través de una amiga como conoció la Provida. “En principio tenía mucho miedo de acercarme allí, no sabía cómo me iban a tratar. Pero me sorprendió la forma en que me acogieron”, explica. Ante todo valora que “me han dado una mano de amistad y apoyo. Estuvieron conmigo hasta el final de mi embarazo con ayuda material, pero lo más importante fue la ayuda psicológica. Me han acogido como un miembro más de la familia”.
Al embarazo, se sumó una enfermedad que llevó a María a estar ingresada quince días en el hospital. “Ellas me mandaron ayuda para estar conmigo hasta que me recuperara. A veces pienso qué habría sido de mí sin su ayuda. Le doy gracias a Dios por existir este tipo de asociación para ayudar a mujeres como yo”, concluye.
Al igual que María, Karina encontró en Provida la ayuda que necesitaba para sus mellizas. En su primer cumpleaños, y para celebrarlo, elaboró un gran árbol con los tarros de leche “que se han tomado durante este tiempo Zoe y Chloe , estoy muy agradecida”.
María Paula y su pequeño Emmanuel agradecen enormemente la ayuda que han estado recibiendo durante todo este tiempo “pañales, pañitos, leche…Agradecerles de todo corazón la bonita gestión que hacen, para las mamis que no tenemos muchos recursos”.
Detrás de Provida Valencia se encuentra un gran equipo constituido por un grupo de voluntarias y voluntarios que trabajan en las tareas de asistencia y ayuda a mujeres embarazadas, en los programas de formación y en la recogida de alimentos. En Provida Valencia trabajan también como voluntarios profesionales y jubilados que dedican tiempo a las tareas de organización, administración y gestión de recursos. Esta labor está apoyada financieramente por más de tres mil asociados que contribuyen económicamente al mantenimiento de las actividades. Lo más importante es que Provida Valencia está abierta a todos sin discriminación alguna.
“Son muchas las familias que atraviesan una situación muy difícil, gracias a personas como ustedes mi hijo ha podido acceder a una serie de productos básicos para su subsistencia y desarrollo: leche, pañales, cereales, champú y ropa desde recién nacido hasta el primer año de vida. Todos los productos recogidos gracias a las campañas nos facilitan la vida un poco. La colaboración es la gran herramienta para construir un futuro mejor”, nos cuenta Sabrina, una de las madres que ha recibido el apoyo y la ayuda a Provida.
“A veces me olvido agradecer a las personas que hacen feliz mi vida, me olvido de decirle lo mucho que realmente los aprecio”, indica, para a continuación agradecer la labor que le han prestado “son una parte importante de mí vida, así que gracias por estar ahí para mí y mi hijo. Tanto yo, como las demás mujeres, hemos quedado muy satisfechas por la ayuda y el apoyo que nos han dado desde el embarazo hasta tener el niño”. De igual manera agradecen “su sensibilidad y generosidad al prestar atención a una realidad tan dura. Me siento muy orgullosa de poder contar con su apoyo”.
Además de la ayuda material, las madres agradecen el apoyo que reciben de cada una de las personas que hacen posible que Provida Valencia siga realizando su labor. Charo resalta la importancia que talleres del cuidado del bebé supuso para ella porque “no sabía nada. La empresa que yo trabajaba se desentendió por mi embarazo, lo estaba pasando muy mal y Provida me ayudo con los pañales, leche, ropita para mi bebé y carrito. Estoy muy agradecida con ellas”.
“Gracias, gracias y mil veces gracias por no encontrar ésas palabras que en grado superlativo encierren nuestro agradecimiento personal”, declara rotundamente y emocionada Soire de origen cubano. “No es una frase de compromiso. Es que se ha materializado su valor en cada momento en que bastaba una llamada vía telefónica para tener una respuesta rápida para ayudarnos”. La ayuda para ella y para el pequeño Ricardo fue muy amplia. “Tuvimos la ropa de abrigo, ropita de todo tipo, leche y potitos para cumplimentar la alimentación y hasta juguetes para los momentos de diversión y entretenimiento”. De igual manera se les ofreció participar en charlas y cursos para la futura inserción laboral y han tenido charlas y apoyo “para enfrentar la crianza del bebé y estamos muy contentas de haber contactado con Provida y todo ese grandioso valor humano que lo integra.”