❐ MARÍA A. PICALLO | 14.9.23
Manos Unidas Valencia colabora con la Diócesis de Sambalpur, en India, en un proyecto de reparación de las instalaciones de un internado de niños tribales en la aldea de Madhupur, una mejora necesaria para seguir recibiendo las subvenciones del Gobierno a través de becas.
Los beneficiarios directos son los 350 niños que viven en los internados y pueden asistir a la escuela ya que “son los que pertenecen a grupos tribales, sin casta, la categoría más baja de la sociedad, privada de todo reconocimiento y atenciones”, explican desde Manos Unidas Valencia.
En la aldea de Madhupur, al nordeste de India, “habita la población tribal y sin casta, en chozas de paja y con una vida muy precaria”. A pesar del crecimiento industrial de los últimos años, “los jóvenes no pueden acceder a un buen trabajo porque no están cualificados y acaban emigrando”.
Una escuela que es “una referencia en la zona, con gran reputación”
Con el objetivo de “superar el retraso social, cultural y económico de la zona”, se fundó la Misión de Madhupur y junto a ella “ha ido creciendo un recinto escolar con una escuela, para Primaria y Secundaria en un edificio de 1982, y otros dos edificios: un internado para niños y otro para niñas, construidos en 1988”.
Reparaciones y mejoras
Esta escuela “supone, en la mayoría de los casos, la única oportunidad que los niños y niñas de zonas más aisladas tienen para estudiar, ya que cuenta con internados donde pueden residir”, según Manos Unidas, que añade que estos menores “antes estaban sin escolarizar por las distancias”.
La institución “es una referencia en la zona y tiene una gran reputación al contar con una media del 97% de éxito -en los últimos 17 años- en el examen de ‘reválida’ tras el último curso (equivalente a 4º de la ESO)”. El Gobierno, desde hace 15 años, ha financiado con más de 200.000 € a casi 4.000 niños para que pudieran estudiar.
La mayoría de alumnos recibe becas ya que pertenecen a colectivos vulnerables pero “estas subvenciones se pueden perder si no se llevan a cabo las obras necesarias para ajustar las instalaciones a la nueva política educativa del Gobierno indio”.
Arreglos necesarios en el recinto escolar
Por este motivo, la Diócesis de Sambalpur solicitó la colaboración de Manos Unidas para, en un periodo de 12 meses, realizar mejoras como la construcción de 30 letrinas y dos fosas sépticas para los dos internados; reparar el tejado y los canalones del edificio de las niñas; excavar un nuevo pozo más profundo y comprar una bomba para extraer agua; y mover 100 metros el muro de cerramiento que delimita el recinto para facilitar un espacio para un huerto para los niños.
Si no se llevan a cabo estas obras, “el recinto escolar no cumplirá con los requisitos del Gobierno y cualquier inspección de los departamentos de educación o infantil podría multar o cerrar el internado, o dejar de financiar a los niños, perdiendo éstos la única oportunidad de integrarse en el mundo escolar”.
Manos Unidas colabora con el 93% de la financiación necesaria de este proyecto y la Diócesis de Sambalpur aporta el resto. Las familias pagan por el alojamiento y el alumnado se ocupa de mantener las instalaciones limpias y ayuda en distintas tareas.