Cientos de alumnos de la Universidad Católica de Valencia, acompañados por sus profesores, padres y familiares, pudieron vivir su fiesta de graduación en el pabellón de la Font de Sant Lluís.
El arco iris que forman los colores de las becas, la prenda que simboliza la óptima finalización de la carrera, ha aumentado este curso con el amarillo oro de Medicina, el rojo de Derecho y el azul turquesa de Biotecnología.
El arzobispo de Valencia, que presió el acto, alentó a los estudiantes a hacer el bien y entregar a la sociedad lo mejor de cada uno.
“Entráis con vuestra graduación en este mundo para curar toda herida de cualquier persona que os encontréis por el camino”, les dijo monseñor Carlos Osoro.
Amplio reportaje de cuatro páginas en la edición impresa de PARAULA