AVAN | 6-03-2014
El papa Francisco recibió el pasado día 28 en audiencia a los obispos de la Provincia Eclesiástica Valentina, integrada por las tres diócesis de la Comunidad Valenciana y de las Islas Baleares, encabezados por el arzobispo de Valencia, monseñor Carlos Osoro, que ha calificado el encuentro como “entrañable”.
En la audiencia, en el marco de la visita ‘ad límina’ que han realizado estos días todos los obispos españoles, Francisco les alentó a ser “pastores de todas las gentes, que les guían y que se dejan orientar también por ellas”, indicó a la agencia AVAN monseñor Osoro, quien destacó, igualmente, que el Papa “recuerda perfectamente su estancia en Valencia en 2006 para el V Encuentro Mundial de las Familias, cuando estuvo como arzobispo de Buenos Aires”.
En la audiencia, que se llevó a cabo en la mañana del día 28 en la Sala Clementina del Vaticano, y se prolongó durante cerca de dos horas, el papa Francisco demostró continuamente “su cariño, su cercanía, y su saber llevarnos en conversación a los asuntos más importantes que traemos, que en definitiva es anunciar a Jesucristo”.
“No habla de oídas” de Valencia
De lo expresado por el Papa a los obispos de la provincia eclesiástica, monseñor Osoro resaltó que “debemos ser pastores que vayamos siempre con la gente, unas veces delante, otras en el medio y otras detrás; pero siempre con toda la gente, pastores que saben ir no sólo con quienes nos reconocen, quieren y aprecian, sino también junto con aquellos otros que, por los motivos que fueran, no conocen al Señor”.
A este respecto, el Arzobispo destacaó la idea expresada por el Papa de que “ser pastor es saber ir indicando el camino, por delante; pero también acompañando y escuchando a la gente cuando vas en medio, e ir por detrás, también, porque a lo mejor la gente sabe por donde ir y te orienta, y eso es muy importante”.
Durante el encuentro, el Papa “nos ha ido mostrando como un padre, lo que quería decirnos con ejemplos muy vivos de cuando él era obispo”, destacó el arzobispo de Valencia, quien añadió que “hemos estado muy a gusto con él, sabe iluminar tu vida de obispo con su propia vida, testimonio y entrega, y tiene una forma de comunicarse especial que alcanza el corazón”.
Por otra parte, “él tiene un recuerdo especial de Valencia, de cuando participó en el V Encuentro Mundial de las Familias con Benedicto XVI, e incluso me ha preguntado de personas concretas, y no habla de oídas, sino que nos tiene localizados, en nuestro sitio y en lo que hacemos”, ha añadido monseñor Osoro.
“Una archidiócesis de santos excepcionales”
En la audiencia con el Papa, por parte de la Provincia Eclesiástica Valentina participaron los obispos de Orihuela-Alicante y Segorbe-Castellón, monseñores Jesús Murgui y Casimiro López, respectivamente; así como los titulares de las diócesis de Mallorca, monseñor Javier Salinas; Ibiza, monseñor Vicente Juan Segura; Menorca, monseñor Salvador Giménez; y Tortosa, monseñor Enrique Benavent. Además, también saludó al Papa, por la archidiócesis de Valencia, al vicario general, Vicente Fontestad, y el secretario del Arzobispo, Álvaro Almenar.
Sobre el desarrollo de la visita ‘ad límina’ por los distintos dicasterios del Vaticano, monseñor Osoro resaltó que más de 40 causas de canonización procedentes de Valencia están tramitándose en la Congregación para las Causas de los Santos, algo cuyo prefecto, el cardenal Angelo Amato, “destacó de una forma especial, asegurando que Valencia es una archidiócesis de santos, y además, excepcionales y eso me alegró muchísimo”. Según monseñor Osoro, “es cierto, lo he comprobado así en los años que llevo como arzobispo de Valencia, que aquí hay hombres y mujeres con una santidad especial que nos están regalando lo más importante para construir la historia de Valencia”, concluyó el Arzobispo.
Informe sobre el estado de la archidiócesis
La visita ‘ad limina’ de los obispos al Papa se produce normalmente cada cinco años. El objetivo es informar al Santo Padre y a los distintos dicasterios vaticanos del estado en el que se encuentran sus respectivas diócesis. Además, la visita tiene el sentido de visibilizar la comunión entre los obispos y el Papa. Por eso, además, los prelados visitan la tumba de S. Pedro, además de la de S. Pablo.
La visita ‘ad limina’ de monseñor Carlos Osoro a Roma se ha producido del 24 de febrero al 3 de marzo. En ese tiempo, ha mantenido dos encuentros con el papa Francisco y varios otros con dicasterios como el Pontificio Consejo para la Familia o la Congregación para el Clero, así como la Secretaría de Estado.
En la visita han tomado parte también el resto de obispos españoles, divididos por grupos de provincias eclesiásticas.
Lea el reportaje íntegro en la edición impresa de PARAULA