Nando Sahuquillo | 15-12-2011
Un crucifijo, un libro de los Evangelios o una imagen de la Virgen sobre la mesa del despacho puede ser, en un momento dado, más eficaz en la trasmisión de la fe que un largo discurso catequético en la universidad actual, a la que llegan jóvenes sin formación cristiana y que, en muchos casos, no han recibido el Bautismo. Así lo manifestaron algunos de los profesores universitarios que participaron el pasado martes en una reunión con el arzobispo de Valencia, monseñor Carlos Osoro.
El encuentro lo organizó la Pastoral Universitaria de la comisión diocesana de Educación, que preside el sacerdote Rafael Cerdá, para abordar el ‘Año de la Fe’, convocado por el papa Benedicto XVI para 2012 con la carta apostólica ‘Porta Fidei’, que recibieron los participantes.