El nacimiento de la catedral de Valencia recupera, tras 70 años, figuras a tamaño natural Estará abierta al público hasta el próximo 8 de enero

“El belén es una oferta de esperanza e ilusión a todos los hombres, una demostración de que el mal no puede con el bien”. De esta forma se expresaba monseñor Carlos Osoro durante la bendición del belén de la catedral de Valencia que, por primera vez, después de más de 70 años, recupera este año figuras a tamaño natural. De esta manera, el belén, instalado en la capilla de San Luis Obispo en el lado izquierdo de la nave central de la Seo, y que ya se puede visitar, quiere conmemorar de nue­vo la tradición de las re­presentaciones que sobre el Na­­­cimiento se realizaban desde el siglo XIV en la Catedral así como el auto sacramental sobre esta misma temática escenificado durante los siglos XV y XVI.
El arzobispo de Valencia, que visitó el Nacimiento, aseguró que “cuando el ser humano deja que lo divino entre en él, asume su protagonismo de la historia de una forma distinta”. Y en referencia a las crisis afirmó que éstas “no tienen otra salida que acoger el misterio e la Encarnación en nuestra vida. Hay hombres y mujeres que no se han dado cuenta de ello; no se lo impongamos porque la fe no se impone, sino que se propone”, propuso. En el acto de la bendición tam­bién participó el coro del colegio de las Esclavas del Sagrado Corazón de Jesús de Valencia.
Tamaño natural
La capilla de San Luis Obis­po acoge un total de 11 figuras a tamaño natural que representan la escena del Nacimiento, con la mula y el buey al fondo más pequeños para crear sensación de profundidad, la adoración de los tres Reyes Magos y de los pastores, según indicó el belenista Pedro Ródenas, organizador del conjunto artístico, que precisó que el montaje ha durado ocho días.
Las figuras, que tienen de 1,70 metros de altura, realizadas en pasta cerámica y vestidas con telas que evocan los trajes de la época, están situadas dentro de una estructura de madera que recrea un pesebre.
Las imágenes están realizadas por el artista belenista José Luis Mayo en su taller de Madrid y fueron mostradas a los participantes del 50º Congreso Nacional Belenistas, que acogió Valencia el pasado octubre.
Igualmente, Pedro Ródenas ha montado en un lateral en el exterior de la capilla tres dioramas que suman 4,5 metros de largo y un metro de profundidad con más de un centenar de figuras que representan las escenas de la búsqueda de posada, el nacimiento y el taller de Nazaret.
En las escenas de los dioramas se representan edificios como el castillo de Herodes, algunos personajes realizando oficios como vendedores, po­­saderos y alfareros o soldados romanos, entre otros.
La obra cuenta con el patrocinio de la Fundación Caja Murcia y la colaboración del Ca­­­bildo metropolitano.