❐ AMPARO CASTELLANO | 07.07.2022
La Fundación CEU cumple medio siglo en la Comunidad Valenciana, impulsada por la la ACdP (Asociación Católica de Propagandistas).“La comunión con el papa era una obsesión positiva del fundador, el cardenal Ángel Herrera Oria, y desde su creación, ha sido en el catolicismo español la punta de lanza del pontificado”, nos explica el Rector del CEU, Vicente Navarro de Luján, que cumple también su tercer aniversario al frente de la institución académica que persigue cubrir necesidades educativas desde el humanismo cristiano.
–50 años de aniversario, de una trayectoria que no esconde un trabajo constante detrás, que recoge ese éxito en multitud de facetas, si tenemos que definir al CEU hoy, ¿cuál es su MARCA?
-El CEU tiene sentido con tres pilares: el servicio a las familias, a los alumnos a la sociedad valenciana. Desde nuestra Fundación hemos llenado huecos en oferta educativa, hemos satisfecho necesidades que no estaban cubiertas y hemos sido pioneros en muchos ámbitos. De hecho nacimos de la mano de nuestro Arzobispado, que nos prestó su casa, nos alquiló un piso en la calle Trinitarios hace 50 años donde instalamos nuestro COU. Se acababa de producir la reforma de Villar Palasí, desapareció el antiguo Bachiller, desapareció el pre-universitario y se creaba el COU. Y miembros de la Asociación Católica de Propagandistas fuimos los que hablamos con el arzobispo d. José María García Lahiguera y pedimos que nos alquilara un espacio, y ahí nacimos. Voy a contar como curiosidad que el COU iba a ser mixto. Esta anécdota es significativa de aquellos tiempos donde los colegios eran de chicos o chicas, y fuimos los primeros que montamos un centro mixto y fue un éxito, y desde esa base fuimos creciendo.
-Ser pioneros, en ese sentido, lo fueron al designar la primera mujer rectora en la historia de las universidades valencianas, con Rosa Visiedo.
-Efectivamente Rosa se formó con nosotros y se quedó en la casa profesora, investigadora y al final fue nuestra rectora. Una persona que conocía muy bien la casa que estaba totalmente integrada en el CEU y en su historia, con nuestros valores, y desde luego cuando se planteó nombrar rector no tuvimos ninguna duda, lo merecía y así lo ha demostrado. Ha tenido dos mandatos en la Universidad, muy buenos y productivos, magníficos, y los estatutos impiden mantenerse en el cargo más de ocho años. Y de hecho al acabar su mandato aquí ha pasado a ser rectora del CEU San Pablo con sede en Madrid.
-En apenas unos días será su propio aniversario como rector de la CEU-UCH, ya que se produjo su nombramiento en el mes de julio del año 2019. Su trayectoria ha estado vinculada a CEU San Pablo y CEU Cardenal Herrera en buena parte de su carrera, en una institución que tiene un carácter propio para discernir ante el contexto de crisis en muchos sentidos, en la vida pública, en el contexto social….
-Si algún sentido tiene el CEU como institución académica desde que se fundó en 1933 es este. El CEU se creó por el cardenal Herrera Oria en la Segunda República, que no era un espacio político muy propicio, pero se creó entonces, y desde ese momento el CEU tiene unos pilares claros: la formación integral de los alumnos, la transmisión de unos valores que son los que nos dan sentido, con el respeto absoluto a la libertad del alumno pero no negamos a nadie que esta institución se inspira en valores del humanismo cristiano. Y desde luego la tercera función, una formación científica y profesional lo mejor posible. Pero no existimos solamente para dar esa formación que evidentemente es importante, sino que con ello tenemos que añadir otras cosas: una visión crítica de la vida, de la realidad, que el propio alumno genere su propio pensamiento de forma libre, no manipulado, sin dejarse llevar por agentes externos que a veces impiden el desarrollo de una opinión propia. Y nosotros como institución lo que hacemos es proponer. Ya decía Pablo VI que la fe no se transmite a través de los escritos, sino por el propio testimonio. Y yo creo que una de las cosas que sí exigimos a nuestros profesores es que den un buen testimonio a los alumnos, porque la mejor forma de transmitir valores es que el alumno perciba que quien los transmite, los ejecuta y los vive.
-Precisamente que mencionaba D. Ángel Herrera Oria, hemos celebrado la solemnidad de San Pedro y San Pablo donde hacemos más visible si cabe la comunión con el Santo Padre y la unidad de la Iglesia. Los propagandistas han mantenido siempre una especial relación con la Santa Sede y con las diócesis, como la nuestra con los arzobispos.
-Siempre. La comunión con el papa era una obsesión positiva de d.Ángel Herrera Oria, y la ACDP (Asociación Católica de Propagandistas) desde su creación, ha sido en el catolicismo español un poco la punta de lanza del pontificado. Evoco a este respecto el desarrollo de la doctrina social de la Iglesia a partir de la Encíclica Rerum Novarum. Fueron los propagandistas los que desarrollaron una Campaña en toda España impresionante. Hace unos días estaba en Cadiz clausurando un curso precisamente sobre la ACDP y la doctrina social de la Iglesia y destaqué el paralelismo que había entre los documentos pontificios que a lo largo de los siglos XX y XXI han ido saliendo y las propuestas que iba haciendo la ACDP: La difusión de esta Encíclica, el Instituto social obrero, las escuelas profesionales de Hernani; en la política la creación de la CEDA, en cuanto al periodismo, la creación de medios católicos como El Debate y la editorial católica como el YA y la cadena de periódicos que hubo por toda España, etc. Es decir, no se entiende el puesto de la ACDP en la Iglesia si no es a partir de esa voluntad de comunión constante e íntima con el Papa. Una de las frases que repetía nuestro fundador Herrera Oria era “la función de la ACDP es servir a la Iglesia como ella quiere ser servida y donde ella quiera ser servida”. Y desde luego la ACDP siempre ha tenido una estrecha vinculación con las diócesis donde está presente, en íntima colaboración, y así seguimos y espero que siga en el futuro.
-Usted fue impulsor de la institución del CEU desde los años 70, también inspirador e impulsor de la Facultad e Ciencias de la Información en Valencia, en la que nos hemos formado buena parte de los que nos dedicamos al periodismo y la comunicación, y fue creciendo como Fundación a la que destinan todos los recursos.
-El CEU en Valencia ha sido una propuesta educativa que ha llenado huecos. Fuimos los primeros en implantar la titulación de Farmacia, que no había en la Comunidad Valenciana. En el año 1986 Periodismo, en 1987 Publicidad, en 1988 Imagen. Poco después Diseño industrial. Fuimos la primera institución educativa con presencia en Elche -luego se creó la pública, Miguel Hernández, pero nosotros fuimos los primeros- y esa ha sido nuestra trayectoria en la Comunidad Valenciana, ver qué necesidades tenía nuestra sociedad y servirla, es la función de nuestra institución. Nosotros somos desde el punto de vista jurídico una Fundación, y por tanto, todos los recursos que generamos, por ley, los hemos de emplear en la tarea educativa para la que existimos.
-El impacto local que genera la Universidad tiene un beneficio directo en la sociedad valenciana, ¿qué parte representa la atracción de estudiantes internacionales?
-Sí efectivamente la población de Alfar tiene un ceso aproximado de unos 3000 habitantes y en Alfara tenemos 2.400 alumnos extranjeros que viven fundamentalmente en Alfara aunque algunos viven también en Moncada. Por tanto, tenemos casi tanta población extranjera como habitantes censados de la propia población…Es una experiencia que está siendo muy rica, muy bonita, y que se ha desarrollado con “poco” esfuerzo por nuestra parte, en el sentido de que no hemos sido una institución que haya hecho una inversión en marketing extraordinaria, no.
Por ejemplo en Veterinaria también fuimos los primeros, y es porque vimos que hacía años que venían alumnos franceses a estudiar en castellano y ese fenómenos se fue ampliando y decidimos crear una linea de veterinaria en francés. Y luego en inglés, que también la tenemos en arquitectura y en todas las carreras d Ciencias de la Salud. Y en todo esto ha sido el boca a boca que ha ido haciendo que haya ido incrementándose el número de alumnos extranjeros hasta llegar al tercio de la universidad.
Creo que proporcionalmente seremos la universidad española que tenga mayor nivel de internacionalización. También como curiosidad, recibí a un alumno extranjero que lleva aquí cinco años y dice que quiere quedarse a vivir en Alfara, cuando tenga trabajo instalarse aquí, porque ha estado muy a gusto. Es una población muy tranquila cercana a Valencia y es curioso que el recuerdo de los alumnos que pasan estos años por aquí es muy positivo, y para nosotros es una satisfacción. En este sentido, nuestra relación con el Ayuntamiento de Alfara desde nuestra instalación aquí, ha sido y está siendo magnífica, hemos encontrado en la Corporación siempre una gran colaboración, y hay que agradecérselo.