C.A. | 11-06-2014
Una semana haciendo presente el Evangelio en las ciudades y pueblos de la Diócesis. Con este espíritu arranca el proyecto ‘Construir la Nueva Ciudad’, que llevarán a cabo los jóvenes del 20 al 27 de julio. La acción misionera promovida por la Comisión de Infancia y Juventud y por el Arzobispo empieza a dar sus primeros pasos y a darse a conocer entre las parroquias y las distintas realidades.
El proyecto establece que grupos de 20 a 30 jóvenes aproximadamente pasen la semana entera en una parroquia y llevando a cabo allí a cabo la misión. Una acción, que como comentó el vicario de evangelización, Javier Llopis, durante la presentación a los sacerdotes y religiosos, “es ser testigo de Jesucristo con sencillez”. En este sentido, el Arzobispo en la carta que ha dirigido a los jóvenes les ha animado “a llenar de la alegría del Evangelio la ciudad”. En la presentación se les dio a los asistentes un casco de obra con el logotipo del proyecto como una forma simbólica de ponerse manos a la obra e ir sin miedo “a lo que pueda caer”.
El presidente de la Comisión de Juventud, Óscar Benavent, comentó que la misión se puede hacer de diversas formas: “Anunciar el Evangelio explícitamente por las calles, estar presente en los templos parroquiales e invitar a la gente a entrar, realizar obras sociales o diferentes servicios como visitar enfermos, atender a los necesitados o hacer actividades con niños”. El día a día de los jóvenes estará marcado por un horario similar para todos. La jornada comenzará con un tiempo de aseo personal y desayuno que seguirá de un momento de oración marcado por el rezo de Laudes y por la Adoración al Santísimo. A las 11 de la mañana dará comienzo la misión y a mediodía se parará para comer y tener un tiempo de descanso. A las 5 de la tarde se reanudará la misión. A final de la tarde los jóvenes se reunirán para rezar Vísperas y celebrar la Eucaristía. El día se concluirá con la cena y un momento de distensión.
Los jóvenes serán enviados en grupos tras un sorteo entre todos los inscritos. “Una forma muy apostólica y que hace que el enviado esté totalmente abierto a la voluntad de Dios”, tal y como señaló Llopis.
Preparación del proyecto
Asimismo, durante la semana misionera los jóvenes vivirán de la providencia. Esto significa, según Benavent, que irán sin nada. Una experiencia que 80 jóvenes de la diócesis ya vivieron en la peregrinación a la canonización de Juan Pablo II y Juan XXIII. Los jóvenes esos días recibirán el sustento necesario y aprenderán a vivir en sencillez y austeridad.
Las preparación de esta acción misionera ha arrancado esta semana con una reunión con los sacerdotes y religiosos dispuestos a acogerla, así como con el envío del material y los carteles a las diferentes parroquias. En una segunda fase los responsables de la Comisión de Juventud se reunirán con los párrocos que acogen a los jóvenes y se establecerá qué tipo de acciones se realizan. El 20 de junio también habrá una reunión con los jóvenes que quieran participar.
La semana arrancará con una eucaristia de envío en la Basílica de la Virgen presida por el Arzobispo. Tras ella los jóvenes se desplazarán a las parroquias. Como cierre se volverán a reunir todos en una eucaristía el domingo 27 también presidida por el prelado en la que compartirán sus experiencias.