Pedro Miret – Párroco de San Francisco de Borja de Valencia
Enrique Masiá – Párroco de Santa Catalina de Alzira
La pasada semana, organizado por la Vicesecretaría para Asuntos Económicos, el Secretariado para el Sostenimiento de la Iglesia y la Oficina de Transparencia de la Conferencia Episcopal Española, se celebraron en Madrid las Jornadas de economía, sostenimiento y transparencia en las que participaron más de doscientos asistentes entre los que se encontraban el administrador de nuestra archidiócesis, D. Antonio Sales, parte de su equipo de administración diocesana, Marité y Silvia, y los sacerdotes diocesanos Enrique Masiá y Pedro Miret, párrocos de Santa Catalina de Alzira y San Francisco de Borja de Valencia, repectivamente.
Las jornadas dieron inicio el lunes, 27 de mayo, con las palabras de bienvenida de Mons. D. Vicente Rebollo, Obispo de Tarazona y responsable del Secretariado para el Sostenimiento de la Iglesia de la CEE y de D. José María Albalad, director de dicho secretariado que valoró muy positivamente los nueve meses de trabajo, compromiso y enriquecimiento mutuo del Programa Piloto sobre Corresponsabilidad Parroquial, “Discípulos agradecidos” en el que hemos participado algunos sacerdotes y fieles cristianos laicos de nuestra diócesis de Valencia.
Durante tres días los asistentes pudieron participar en distintas ponencias y talleres en los que se dio a conocer el trabajo realizado, en las distintas diócesis de España, en materia de economía y transparencia, así como se trazaron nuevas líneas de actuación con las que continuar por el camino emprendido.
Según pudimos constatar en las jornadas, por los datos aportados por los ponentes, nuestra diócesis de Valencia ha sido una de las diócesis españolas pioneras y en las que más se ha avanzado en el desarrollo de programa diocesano de gestión económica, así como en la utilización de la plataforma “donoamiiglesia” y, todo ello, gracias a la labor llevada a cabo desde los servicios que presta nuestra administración diocesana.
Durante las jornadas se hizo mucho hincapié en la importancia de vincular la misión de la Iglesia, es decir: anunciar, celebrar y compartir la salvación, a toda la gestión económica que hace posible el cumplimiento de dicha misión. La iglesia tiene que aprender a aplicar criterios de sostenibilidad, desde su Doctrina Social y desde una dimensión pastoral pero siempre, utilizando criterios profesionales, sin renunciar a nuestra razón de ser.
Las jornadas concluyeron con las palabras de Mons. César García Magán, obispo auxiliar de Toledo y Secretario General de la CEE agradeciendo la participación de todos los asistentes y animando a todas las diócesis a trabajar unidas, con el fin de consolidar todo el trabajo llevado a cabo en los últimos años.