E.A.| 21-06-2018
La próxima semana concluye el plazo para presentar la declaración de la renta y rendir cuentas con Hacienda por lo ganado el pasado año.
Cáritas Diocesana de Valencia quiere animar, a los que todavía están a tiempo, para marcar la “X” de manera conjunta en las dos casillas solidarias de la Asignación Tributaria, la destinada a la Iglesia Católica y la de Actividades de Interés Social.
Se trata de un pequeño gesto que, sin embargo, tiene un gran valor, ya que con el se ayuda a muchas personas. Con la asignación que recibió Cáritas Diocesana de Valencia el año pasado, y que ascendió a un total de 178.902 euros, la entidad pudo acompañar a 5.331 personas, a través de diferentes programas en la diócesis de Valencia.
De este modo se financió el trabajo de acompañamiento a personas migrantes en cinco viviendas; a personas sin hogar, a través del centro pre laboral Mambré; o las tareas que se realizan con mujeres en contexto de prostitución y trata.
Además, se apoyaron los 48 proyectos de familia e infancia que las Cáritas parroquiales desarrollan para mujeres y menores de edad en riesgo de exclusión social. Y parte de la asignación recibida a través del IRPF sirvió también para llevar a cabo acciones de formación para el empleo.
MEJOR2
Con el lema “Algunas personas no dan nada. Otras solo la mitad. MEJOR2”, Cáritas ha desarrollado durante estos meses una campaña para recordar a los declarantes la posibilidad que les ofrece la Declaración de la Renta de multiplicar por dos su solidaridad.
Al marcar ambas opciones de forma simultánea -opción que no afecta al resultado de la declaración, tanto si es ingresar como a devolver-, los ciudadanos pueden colaborar destinando un 0,7 % de su base imponible a sostener la acción de la Iglesia y otro 0,7 % a apoyar los fines sociales que desarrollan Cáritas y otras muchas organizaciones sociales que reciben fondos del IRPF para financiar una parte de su labor humanitaria.
En el ejercicio del año pasado, de los más de 19,6 millones de declarantes, un 33 % (6,4 millones de declarantes) no marcaron ninguna de las casillas solidarias, con lo que ese importe de sus declaraciones pasó a engrosar directamente las arcas del Estado.