L.B E.A | 07.05.2020
La congregación de religiosas Madres de Desamparados y San José de la Montaña continúa ofreciendo comida a diario en la puerta de su iglesia. Pero en estos tiempo de pandemia lo hacen gracias a la colaboración del Banco de Alimentos y a ‘World Central Kitchen’, ONG del chef español José Andrés, que ha abierto cocinas en diversas ciudades españolas para luchar contra el hambre en medio de la pandemia del coronavirus.
Todos los días, desde hace más de 50 años, a las 13 h., las religiosas abren las puertas de su casa para repartir bocadillos a las personas necesitadas, a las que también ofrecen fruta o algo dulce, productos que les donan comercios y supermercados. “La comida nunca se le niega a nadie. Damos todo lo que tenemos. Normalmente se nos acaba todo”, indica la madre Carmelina.
A las cerca de 30 bocadillos que reparten cada día, ahora se suman 45 bolsas preparadas por ‘World Central Kitchen’ y en las que se incluye un plato diferente cada día con ensalada y postre. Las propias religiosas acuden a recogerlas para luego repartirlas.
“Hasta ahora venía gente de la calle, pero ahora hacen cola personas bien vestidas, que tiene casa, pero no para comer. Incluso hay quien pide para toda la familia. Es una pena”, añade la religiosa, que ahora, para el reparto, se cubre con ropa adecuada, mascarilla y guantes.
Además, las Madres de Desamparados siguen repartiendo ropa. “Ahora, por el coronavirus, no estamos recogiendo, pero aún damos la que nos queda en el ropero de antes de la pandemia. Es lo único en lo que podemos ayudar”, indican las Madres de Desamparados y San José de la Montaña.