C.ALBIACH | 17-02-2017
Que niños sin recursos de la República Centroafricana puedan disfrutar de su pasión y afición por la música. Este es el objetivo de la campaña que han puesto en marcha el director de cine, Javier Santamaría, y la delegación diocesana de Misiones en la que recogen instrumentos musicales de segunda mano.
Los instrumentos, como cuenta Santamaría, serán destinados al colegio San Francisco Javier de la localidad centroafricana de Berma, donde uno de los profesores quiere crear una escuela de música para los niños y jóvenes. “Los alumnos de allí tienen mucha pasión por la música pero apenas tienen recursos para los instrumentos, puesto que los fabrican con materiales de desecho como neumático o chapa”, detalla el director de cine.
Aunque se recogen todo tipo de instrumentos los que más necesitan son los de viento y percusión. La recogida de los instrumentos la realizan en la delegación de Misiones, situada en la calle Avellanas 22 de Valencia. Santamaría inicia esta campaña tras la petición que le hizo llegar monseñor Juan José Aguirre, obispo de Bangassou.
Precisamente Mons. Aguirre es el protagonista de la película ‘Corazón de África’, que ha dirigido el propio Santamaría y que fue presentada en Valencia el pasado mes de mayo.
Para sufragar los gastos de envío de los instrumentos al país africano van a realizar el próximo 2 de marzo a las 20.15 h. un pase solidario de la película en los cines ABC Park de Valencia. Las entradas, que tienen un coste de seis euros, se pueden adquirir a través del correo electrónico elcorazondeafrica@gmail.com o en delegación de Misiones. También hay una fila cero de cinco euros.
Corazón de Africa
La película cuenta la vida de los hermanos Pius y Zinda que huyen de una aldea de la frontera centroafricana cuando es atacada por la guerrilla de la LRA. Los hermanos llegan solos y asustados a Bangassou, donde les acogen las Abuelas de Bangassou, un grupo de mujeres que cuidan a niños huérfanos con la ayuda del obispo Juan José Aguirre. La vida de ellos cambiará para siempre y sus caminos volverán a cruzarse años después en España.
El filme refleja la labor de los voluntarios y los misioneros, que con su trabajo diario consiguen devolver a los más pobres la esperanza de vivir. Es todo un reflejo de la voz de un pueblo oprimido y olvidado.