Eduardo Martínez | 8-04-2015
La plataforma digital iMisión se ha convertido, en sólo tres años desde que fue creada, en una de las más relevantes dentro del ámbito de la evangelización en internet. Cuenta por de pronto con mil voluntarios inscritos en su web, 11.000 seguidores en Facebook y 19.000 en Twitter. En esa última red social, se erigió las pasadas Navidades en el primer grupo católico español en lograr un trending topic (tendencia o tema del momento) a nivel mundial, con el hashtag (etiqueta) #iNavidadIrak. Su éxito y su fidelidad a la Iglesia han hecho que la Conferencia Episcopal Española (CEE) le concediera recientemente uno de sus premios ¡Bravo!.
Este mismo sábado, iMisión ha organizado una iParty (encuentro de misioneros digitales) de forma simultánea en nueve ciudades españolas, una de ellas Valencia. Una de las fundadoras de la plataforma, Xiskya Valladares, religiosa de Pureza de María y conocida por muchos como la “monja tuitera” (25.000 seguidores en Twitter), participará en el encuentro de Valencia. PARAULA ha conversado con ella sobre la iParty, así como sobre el potencial evangelizador en internet o sobre su propia vocación en este ámbito.
– Hermana Xiskya, ¿qué se encontrarán en la iParty todos aquellos que quieran participar?
– Sobre todo comunión, formación y celebración. Comunión, porque creemos que hace falta animarnos en esta tarea muchas veces difícil y solitaria. La unión de fuerzas y el sentirnos acompañados anima, hace que la gente se sienta respaldada y que se comprometa más. Eso pretendemos conseguirlo con el hecho de que el encuentro sea presencial. Encontrarán también formación, que es uno de los objetivos más propios de iMisión. En este caso, mediante un espacio de intercambio de conocimientos y experiencias entre los participantes. Habrá, además, una ponencia marco a cargo de Isidro Catela [hasta hace unos meses director de la oficina de prensa de la CEE], un taller sobre evangelización a través de la fotografía [lo impartirá la propia Xiskya] y otros dos talleres seleccionados a partir de las propuestas que nos han enviado los inscritos en el encuentro. Habrá también momentos para celebrar la fe juntos, con una eucaristía al principio y una oración al final.
– Normalmente los encuentros convocados por iMisión se desarrollan virtualmente, en internet, pero el año pasado hubo un congreso presencial y también lo será la iParty. ¿Qué valor da iMisión a lo digital y a lo presencial?

– Para nosotros es vital no quedarnos en lo digital y pasar a lo presencial. Los expertos en redes sociales y también Benedicto XVI y Francisco han animado en varias ocasiones a salir, a provocar el encuentro fuera de lo digital para poder crear vínculos más estrechos y naturales. En este sentido, entendemos internet como una antesala que nos lleve a la comunión presencial, porque estamos convencidos de que la fe sólo se puede vivir en comunidad y de forma presencial. De hecho no hay sacramentos virtuales o digitales. Internet facilita el contacto con personas que de otra manera sería imposible conocer, pero luego, en un segundo paso, intentamos fomentar ese contacto presencial, más profundo.
– Uno de los talleres de la iParty tratará sobre cómo aprovechar las imágenes para evangelizar, y lo impartirá usted, que es una apasionada de la fotografía. ¿Nos podría adelantar algún consejo?
– Sí. Es importante que la calidad de la foto sea buena. Es algo que parece obvio, pero mucha gente no lo tiene en cuenta. Además, la foto ha de tener un mensaje humano; cuanto más humano, más cercano y atrae más. Y también es importante que sea lo más creativa posible, aunque sea un reflejo de lo cotidiano. De hecho, en lo cotidiano, abriendo bien los ojos, podemos descubrir el paso de Dios por la vida. Muchas veces, hasta a las cosas más simples les podemos dar ese enfoque. No tienen por qué ser necesariamente mensajes religiosos, porque Dios habla a través de todo lo humano, de lo que vivimos, de lo pequeño, sencillo y rutinario. Hablo, por ejemplo, de subir fotos de nuestras aficiones, de lo que nos gusta… pero dándole el testimonio de nuestra fe. También ayuda el hecho de añadir frases cortas e impactantes en las fotografías.
– En su mensaje para la próxima Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales, el papa Francisco habla de la necesidad de “comunicar en la proximidad” y de que hay que “volver a aprender a narrar, no simplemente a producir y consumir información”. ¿Qué le sugieren esas palabras, vistas en clave de cómo transmitir eficazmente el mensaje del Evangelio a través de los medios de comunicación, incluido internet?
– Están en la línea de lo que Juan Pablo II enseñó sobre el concepto de ‘nueva evangelización’, cuando explicó que no se trata de contenidos nuevos sino de nuevas formas, de nuevo ardor, de nuevos métodos… En estos nuevos medios, como las redes sociales, se observa que cuando queremos evangelizar usando el mismo lenguaje de siempre a menudo no nos entienden ni nos escuchan, porque estamos hablando en otro idioma al propio de ese ámbito. No es que el contenido no sea atractivo, es que ese lenguaje no lo es. Somos nosotros los que convertimos el mensaje en aburrido o en poco cercano.
– iMisión ha cumplido tres años. ¿Qué frutos se observan ya en su labor evangelizadora?
– Los frutos del Espíritu son normalmente difíciles de medir porque están dentro del corazón de cada uno. Pero si podemos decir que, para nosotros, ya fue un fruto la buena respuesta que tuvo el congreso que organizamos el año pasado; también el entusiasmo de muchas personas con el proyecto, que ha hecho por ejemplo que haya mil voluntarios inscritos en nuestra web; o el hecho de que algunas personas hayan tenido fuertes procesos de conversión espiritual tras entrar en contacto con iMisión, hasta el punto de que algunas de ellas forman ahora parte de nuestros colaboradores más cercanos.
– ¿Cómo explicaría el potencial evangelizador de internet?
– Desde luego, tiene un potencial muy alto. Además de todas las posibilidades que representa, se trata de una herramienta gratuita, algo impensable hace tiempo. Es también, y principalmente, un ‘lugar’, donde hay mucha gente (en Twitter, por ejemplo, hay más de quinientos millones de inscritos). Benedicto XVI llamó a internet el “continente digital” y el padre Antonio Spadaro en su libro ‘Ciberteología’ habla de que hay que concebir internet más como un lugar que como una herramienta.
Internet permite, además, traspasar fronteras y llevar el Evangelio hasta los confines de la tierra de una forma fácil y rápida. Por otra parte, nos permite darnos cuenta de que a veces en la Iglesia no tenemos una buena imagen por razones válidas, y eso nos ayuda a corregirnos. Ayuda a conectar con otros evangelizadores que también están en internet y aprender recíprocamente. Permite formar una comunidad entusiasmada por anunciar el Evangelio. Es un altavoz de los que no tienen voz. Y, entre otras muchas ventajas que se podrían citar, obliga a fomentar una creatividad que tanta falta nos hace para la evangelización.
– En su blog ha llegado a decir también de internet -parafraseando al papa Francisco al hablar él de la Iglesia- que es como un “hospital de campaña”…
– Sí, la red también lo es porque allí hay mucha gente herida a la que se le puede ayudar a curar mediante el Evangelio y el testimonio de fe y vida. Eso sí, también es importante saber escuchar y dialogar. A veces sólo escuchamos lo que nos interesa. Pero tenemos que aprender mucho de quienes nos dicen cosas que nos desagradan y dialogar con humildad, porque a veces nos colocamos con una actitud de prepotencia que perjudica el mensaje.
– En su opinión, ¿hemos descubierto en la Iglesia suficientemente las posibilidades que brinda internet o queda todavía camino por recorrer?
– Hay mucho camino por recorrer. La Santa Sede lleva mucha delantera pero en las diócesis y en algunos grupos eclesiales todavía se minusvalora este medio por falta de conocimiento. Eso es ir contracorriente sin mucho sentido, porque la gente va a seguir estando ahí, muchas veces con sus heridas y su necesidad de ser curados espiritualmente. Además, hay todavía miedo a estar presentes en las redes sociales y a nivel individual a muchos católicos todavía les da apuro reconocer en estos medios que son creyentes, algo por cierto que resulta increíble para los cristianos perseguidos en Oriente Próximo, que se juegan la vida de verdad por mostrar su condición [la religiosa pudo comprobarlo de primera mano las pasadas Navidades en un campo de refugiados de Irak, en una visita organizada por la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada].
– La última pregunta es, más bien, un ejercicio tuitero. Si tuviera que decirle algo muy importante a la gente en un solo mensaje corto, de un máximo de 140 caracteres (como en Twitter), ¿qué le diría?
– Uf… [Risas] Así, a bote pronto, no es fácil… Pero mira, justamente ayer escribí un mensaje en Twitter que quería ir un poco en esa línea. A lo mejor puede servir, era algo así como: “Despierta el gigante que tienes dentro de ti y ofrece a los demás la mejor versión de ti mismo”.

Vocación doble: vida religiosa y Periodismo Xiskya Lucía Valladares Paguaga nació en León (Nicaragua) en 1969. Religiosa de la congregación Pureza de María, está destinada en España desde hace 24 años, los tres últimos en Palma de Mallorca. La historia de su doble vocación (la religiosa y la periodística o comunicativa) es la de aquel que descubre que “Dios te devuelve aquello a lo que tú renuncias por Él”. En su caso, ella renunció al Periodismo pensando que no sería compatible con la vida religiosa. Estudio en un colegio de Pureza de María de su país natal y también participó en el grupo juvenil de la congregación. Ahí surgió su vocación religiosa. “Vi que ésa sería la manera de ser feliz”, recuerda. Sin embargo, desde niña se sentía fuertemente atraída por el Periodismo. Con sólo 10 años, vivió la guerra sandinista del 79 y ya empezó a apuntar maneras: “Me gustaban mucho los reporteros de guerra, me escapaba a la calle para ver que había pasado, me gustaba que mi padre me llevara allí, tenía una curiosidad enorme…”. Esa misma curiosidad –tal como ella lo relata- le condujo a Twitter en el año 2009. Se enteró de que una cuenta en esa red social se ofrecía para enviar al Muro de las Lamentaciones de Jerusalén las oraciones personales que los internautas escribieran.Xiskya realizó su primer tuit con ese propósito y ya no volvió a utilizar su cuenta hasta dos años después. Esa vez, lo que le hizo volver sus ojos a Twitter fue el movimiento del 15-M, que tan profusamente utilizó esa red social para difundir su actividad. La religiosa lo sabía y por eso recurrió a ella – además de visitar la acampada en la Puerta del Sol- para enterarse de todo lo que sucedía. Pocos meses después, en aquel mismo 2011, escribió para el diario ‘El Mundo’ una serie de crónicas de la Jornada Mundial de la Juventud presidida por Benedicto XVI en Madrid. En ese rotativo había empezado a colaborar unos meses antes, durante el periodo en el que realizó el máster oficial de Periodismo de la Universidad Ceu San Pablo. Xiskya, cuya formación inicial es en Filología Hispánica, solicitó cursarlo tras ser trasladada por su congregación a Palma de Mallorca para que diera clases de Periodismo en la universidad que el instituto religioso dirige allí. Durante aquella JMJ, volvió a recurrir a Twitter, pero esta vez para erigirse ella misma en informadora: “Ahí es donde me di cuenta del potencial enorme de Twitter para transmitir el mensaje del Evangelio”. La fundación de iMisión En aquella época, Xiskya entró en contacto por Twitter con un internauta con quien acabaría fundando en 2012 iMisión: el marianista valenciano Daniel Pajuelo. Curiosamente, la creación de la plataforma tuvo que ver en buena medida con los ataques verbales que ambos sufrieron en internet por mostrarse como cristianos.Ambos reflexionaron sobre ello junto con sus seguidores en Twitter y de ahí surgió la idea de crear un espacio digital y católico donde aunar voces y fuerzas. Desde entonces, aquella niña con inequívoco olfato periodístico en los duros años de la guerra nicaragüense no ha parado de desarrollar su vocación comunicativa. Y lo ha hecho, además (quién se lo iba a decir a ella), en total sintonía con su vocación como religiosa. Tanto es así que en la actualidad, y en paralelo a su actividad en iMisión, da clases de Periodismo y de Comunicación Audiovisual en la universidad de su congregación en Palma de Mallorca, dirige el gabinete de prensa del propio Centro de Enseñanza Superior Alberta Giménez, y es directora también de la revista de las hermanas de Pureza de María. web: www.xiskya.com Twitter: @xiskya

Todo sobre la iParty en Valencia ✓ Fecha: 11 de abril ✓ Hora: 10:00 am – 8:00 pm ✓ Precio: 15€ ✓ Hashtag del encuentro: #iMisionParty ✓ Página web: http://iparty.imision.org/inscripvale Programa ✓ 9.30 h. Acreditación ✓10 h. Bienvenida y eucaristía oficiada por Javier Llopis, vicario de Evangelización ✓11.15 h. Dinámica de conocimiento ✓12 h. Conexión entre las diferentes sedes y Colegio Pureza María-Valencia, sede de la iParty, y ponencia marco: ‘Cinco panes, dos peces y 140 caracteres’, por Isidro Catela. ✓13 h. Taller ‘Trucos para evangelizar con la fotografía’, por Xiskya Valladares ✓14 h. Comida. Después de la comida, testimonios del congreso, talleres y oración Lugar ✓ Dónde: Colegio Pureza de María – Valencia ✓ Dirección: Avenida del Cid, 142, Valencia. Tel: 96.379.12.00 ✓ Cómo llegar: – En metro: líneas 3 y 5, parada Nou d’Octubre – EMT: líneas 3, 29, 70, 81, 95 Organizador ✓ iMisión (www.imision.org) web: imision.org Twitter: @imision