Redacción | 2-02-2012
El Pontificio Consejo para los Laicos publicó el 20 de enero un decreto por el que aprueba las celebraciones contenidas en el Directorio Catequético del Camino Neocatecumenal, según informa la Sala Stampa de la Santa Sede a través del Vatican Information Service (VIS).
Éste es el texto publicado: “Con decreto del 11 de mayo de 2008, el Pontificio Consejo para los Laicos aprobó de modo definitivo el Estatuto del Camino Neocatecumenal y, sucesivamente, después de haber debidamente consultado a la Congregación para la Doctrina de la Fe, con decreto del 26 de diciembre 2010 dio su aprobación a la publicación del Directorio Catequético como texto válido y vinculante para las catequesis del Camino Neocatecumenal”.
“Ahora, vistos los artículos 131 y 133, ‘1 y ‘2, de la Constitución Apostólica ‘Pastor Bonus’ sobre la Curia romana, el Pontificio Consejo para los Laicos, recibido el parecer favorable de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, concede la aprobación a aquellas celebraciones contenidas en el Directorio Catequético del Camino Neocatecumenal que no resultan por su naturaleza ya reguladas por los libros litúrgicos de la Iglesia”.
El mismo 20 de enero, el Papa recibió en el Aula Paulo VI a 7.000 miembros del Camino, entre ellos sus responsables, los españoles Kiko Argüello y Carmen Hernández, y el sacerdote italiano Mario Pezzi. Benedicto XVI recordó el citado decreto “con que se aprueban las celebraciones presentes en el ‘Directorio Catequético del Camino Neocatecumenal’, que no son estrictamente litúrgicas, pero forman parte del itinerario de crecimiento en la fe. Es otro elemento que os demuestra cómo os acompaña la Iglesia, con atención y paciente discernimiento, que comprende vuestra riqueza, pero se preocupa también por la comunión y la armonía de todo el ‘Corpus Ecclesiae’”.
El Santo Padre se refirió también a la celebración de la Eucaristía, que, “siendo el culmen de la vida cristiana, es también el punto de apoyo de su redescubrimiento, al cual tiende el neocatecumenado”. Precisamente “para favorecer el acercamiento a la riqueza de la vida sacramental por parte de las personas que se han alejado de la Iglesia o que no han recibido una formación adecuada, los neocatecumenales pueden celebrar la Eucaristía dominical en una pequeña comunidad”, recordó.
“La celebración en las pequeñas comunidades, regulada por los libros litúrgicos, que hay que seguir fielmente, y con las particularidades aprobadas en los Estatutos del Camino, tiene la función de ayudar a cuantos recorren el itinerario neocatecumenal a percibir la gracia de estar incorporados al misterio salvífico de Cristo”. Al mismo tiempo, “la progresiva maduración de la fe de cada persona y de la pequeña comunidad debe favorecer su incorporación en la vida de la gran comunidad eclesial, que encuentra su forma ordinaria en la celebración litúrgica de la parroquia, en la cual y por la cual actúa el neocatecumenado”.
“Pero también durante el camino es importante no separarse de la comunidad parroquial, precisamente en la celebración de la Eucaristía, que es el verdadero lugar de la unidad de todos, donde el Señor nos abraza en los diversos estados de nuestra madurez espiritual y nos une en el único pan que nos hace un único cuerpo”, agregó Benedicto XVI.
Familias misioneras
Durante el encuentro, en el que participaron numerosos cardenales, arzobispos y obispos, el Papa dijo, asimismo, que “la Iglesia ha reconocido en el Camino un don especial que el Espíritu Santo ha dado a nuestro tiempo; la aprobación de los Estatutos y del ‘Directorio Catequético’ son una señal. Os animo a ofrecer vuestra contribución original a la causa del Evangelio. En vuestra valiosa obra, buscad siempre una profunda comunión con la Sede Apostólica y con los pastores de las Iglesias particulares a las que pertenecéis: la unidad y la armonía del cuerpo de la Iglesia son un testimonio importante de Cristo y su Evangelio en el mundo en que vivimos”.
En el transcurso del acto, el Papa envío 17 nuevas misiones ‘ad gentes’ del Camino: doce en Europa; cuatro en América y una en África. Cada una de estas misiones está formada por tres o cuatro matrimonios con sus hijos, que con un sacerdote se trasladan a vivir a una zona descristianizada o donde el Evangelio no se ha anunciado.
Bendición en Valencia
Por su parte, el arzobispo de Valencia, monseñor Carlos Osoro, bendecirá el próximo martes en el Palacio Arzobispal a seis familias del Camino que partirán desde nuestra diócesis como misioneras a diferentes países.