CARLOS ALBIACH | 13-06-2019
Con la eucaristía se abrieron los actos conmemorativos del 25 aniversario. (FOTO: A.SÁIZ)
“Los colegios diocesanos tienen que llevar a cabo una enseñanza de máxima calidad y competente en todos los ámbitos sin olvidar su identidad, que les lleva a dar a conocer a Jesucristo a los niños y a los jóvenes, además de servir a los más necesitados”. Con estas palabras el arzobispo de Valencia, el cardenal Antonio Cañizares, animó a los profesores y personas vinculadas a los 67 colegios diocesanos en la eucaristía de acción de gracias con la que la Fundación Colegios Diocesanos ‘San Vicente Mártir’ abrió el pasado viernes los actos de su 25 aniversario.
Ante una Catedral llena el arzobispo de Valencia dio gracias por todos estos colegios, muchos de ellos, remarcó, “nacidos en pueblos y barrios pobres como los que impulsó el arzobispo de Valencia, Mons. Marcelino Olaechea”. De ahí, que les invitará a “estar al servicio de los más necesitados y los más débiles”.
Durante la homilía el arzobispo de Valencia remarcó que vivimos momentos complicados para la escuela católica pero sin embargo es su gran momento para crear una humanidad y una culturas nuevas”. En este sentido, el Cardenal remarcó que los colegios diocesanos “no son unos colegios más y sí importa que no estemos”.
El Arzobispo alentó a los profesores, directivos y sacerdotes responsables de los colegios diocesanos presentes en la eucaristía a ofrecer una educación “competente en todos los ámbitos”: “con menos medios tenemos que ofrecer más calidad”. Además, les invitó a no olvidar su presencia evangelizadora, ya que así “se enseñará el arte de vivir y se ofrecerá a Jesucristo a los niños y jóvenes”. “Nuestros colegios tienen la tarea de mantener un diálogo con la fe en una cultura no cristiana y preparar a los alumnos a vivir en sociedad, además de ayudarles en su conversión y a abrir caminos de vocación personal”. “No se trata tanto de ofrecer valores humanos sino de ofrecer a Jesucristo, que es el único que hace hombres nuevos. Tienen que ser colegios libres que hagan hombres libres”, añadió.
El arzobispo les exhortó a que en todos los colegios haya una capilla y que “sea un lugar importante para el encuentro con el Señor tanto de alumnos como de profesores”. Asimismo, les animó a llevar a cabo celebraciones “donde se escuche la Palabra de Dios, que ayuda para darle un sentido a la vida”. También les animó a hacer frente a las ideologías como la ideología de género.

25 años unidos

Por su parte, el gerente de la Fundación, Miguel Ángel Coello, dio las gracias a Dios por estos 25 años, “en los que se ha impulsado la unidad de todos los centros y se ha ofrecido una educación que evangelice y coherente con la antropología cristiana”. “La Fundación sin los colegios no sería posible. Nuestro sentido es estar al servicio de las familias, especialmente de las más pobres, y llevar a los alumnos a Cristo”.
En la eucaristía concelebraron los obispos auxiliares de Valencia Mons. Esteban Escudero y Mons. Javier Salinas, así como el presidente de la comisión Diocesana de Educación, Rafael Cerdá, entre otros sacerdotes. Participó en ella el coro del colegio diocesano Ntra. Sra. de Fátima.
La apertura de estas celebraciones se cerró con un concierto de la Banda Diocesana de música de colegios diocesanos en el colegio diocesano Ave María de Peñarrocha.