Redacción | 21-11-2013
El papa Francisco entregará su primera exhortación apostólica este domingo, 24 de noviembre, en la plaza de San Pedro, durante la celebración de la misa de clausura del Año de la Fe. El documento pontificio se titula ‘Evangelii gaudium’ y trata sobre la evangelización en la actualidad. A su vez, la Santa Sede presentará el documento el martes 26 de noviembre.
El Santo Padre recogerá en ‘Evangelii gaudium’ algunas de las conclusiones del Sínodo de Obispos de la Nueva Evangelización, celebrado en octubre de 2012, y añadirá sus propias ideas al respecto.
Final del Año de la Fe
La entrega de la exhortación apostólica distinguirá la conclusión del Año de la Fe -iniciado en octubre de 2012 por Benedicto XVI, con ocasión del 50 aniversario de la inauguración del Concilio Vaticano II-, un evento que ha llevado a ocho millones de peregrinos a venerar los restos de san Pedro.
A lo actos finales del Año de la Fe se han de añadir otras dos citas del Papa. La primera, en orden de tiempo, es la visita al monasterio de las camaldulenses en el Aventino, el jueves 21 por la tarde, en la jornada pro orantibus. El otro es el encuentro con los catecúmenos, previsto para el sábado 23 de noviembre por la tarde.
El presidente del Pontificio Consejo para la Promoción de la Nueva Evangelización, monseñor Rino Fisichella, ha explicado que el Año de la Fe “ha sido muy estructurado” y que, a pesar de que ahora concluye, “el compromiso continúa con la evangelización”.
‘Misericordina’: medicina para el alma, distribuida en la plaza de San Pedro
Tal como lo sugirió el Papa a los fieles y peregrinos reunidos en la plaza de San Pedro para rezar el Ángelus dominical, existe una “medicina espiritual”, llamada ‘Misericordina’. Es cuanto contiene una cajita,que algunos voluntarios distribuyeron al final de la oración, que contiene una corona del Rosario, con la cual se puede rezar también la ‘Coronilla de la Divina Misericordia’, ayuda espiritual para nuestra alma y para difundir en todas partes el amor, el perdón y la fraternidad.
De este modo, como dijo Francisco, será posible concretar los frutos del Año de la Fe, que llega al final.
Bromeando, el Santo Padre dijo: “¿Cómo?, pensarán, ¿es que el Papa se ha hecho farmacéutico? No, se trata de una medicina espiritual para mantener los frutos del Año de la Fe, que ahora termina”. Y añadió: “Son 59 pastillas que ofrecen el amor, el perdón y la fraternidad”.
“¡No se olviden de tomarla!”, exclamó, pues “hace bien al corazón, al alma y a toda la vida”.
Posología
En el interior de la caja de Misericordina se encuentra un rosario, una imagen de la Divina Misericordia y un folleto explicando cómo se administra este medicamento.