Coincidiendo con la fiesta de la Presentación del Señor cada año la Iglesia dedica una jornada a la vida consagrada. Un día para acordarse los religiosos y religiosas que entregan su vida plenamente a Cristo. Una entrega que se refleja en la oración callada y contemplativa pero también en el servicio a los demás: a los niños y jóvenes, a los enfermos, a los mayores, a los más necesitados…

CARLOS ALBIACH| 1.2.24

Aquí estoy, Señor, hágase tu voluntad”. Con este lema la Iglesia celebra este año la XXVIII Jornada Mundial de la Vida Consagrada, en la que da a conocer el testimonio de los religiosos y religiosas que han ofrecido servir al Señor con su vida. Ese servicio les lleva a por un lado dedicarse a la oración retirada, como es el caso de los monasterios de clausura, donde a través de la oración sostienen la vida de la Iglesia. Pero también esa misión les lleva a servir a los demás, especialmente a los más necesitados y desamparados. De ahí que la vida consagrada esté unida a diferentes campos como la educación o la atención a enfermos y mayores. También al servicio de la caridad y colaborando en la vida de la Iglesia.

Con el lema de este año, como destaca la Comisión Episcopal para la Vida Consagrada de la Conferencia Episcopal Española, se presenta “la plegaria evangélica con la actitud de quien se sabe llamado por Dios”. Subrayan, que de este modo, “la persona consagrada puede decir con plena conciencia y libertad: «¡Aquí estoy!”. Más aún, quieren señalar que el “¡Aquí estoy!, con toda su fuerza, se convierte en ¡Aquí estamos!”. “No solo porque donde un cristiano dice yo está diciendo nosotros, sino porque el nosotros eclesial y de Vida Consagrada del momento que vivimos nos invita a ofrecernos y disponernos a buscar, procurar y hacer la voluntad divina como comunidad, dentro del pueblo de Dios en camino”, añaden

Misa en la Catedral
Con motivo de la Jornada de la Vida Consagrada la Catedral de Valencia acogerá el mismo viernes 2 de febrero una eucaristía en la que participarán miembros de las realidades de vida consagrada presentes en la diócesis. La misa será presidida por el arzobispo de Valencia, mons. Enrique Benavent.