REDACCIÓN | 28-11-2019
La catedral de Valencia y la dirección general de Patrimonio de la Conselleria de Cultura acordaron el pasado martes 26, iniciar una serie de estudios sobre las afecciones en los frescos renacentistas de los ángeles músicos en la bóveda del altar mayor, ante la aparición de eflorescencias en varios puntos, con el fin de “procurar la mejor conservación” de estas pinturas realizadas en la segunda mitad del siglo XV por los artistas italianos Francesco Pagano y Paolo de San Leocadio.
El subdirector general de Patrimonio Cultural y Museos de la Conselleria de Cultura, Antonio Bravo, y la directora del Instituto Valenciano de Conservación y Restauración de Bienes Culturales, Gemma Contreras, visitaron la catedral de Valencia donde fueron recibidos por el canónigo de conservación del Patrimonio, Jaime Sancho, y el canónigo Archivero, Vicente Pons, así como por el arquitecto titular de la Seo, Salvador Vila, y los técnicos que intervinieron en la recuperación de los frescos tras su hallazgo en el año 2004.
Examinada la situación, se acordó por parte de la Catedral y la dirección general de Patrimonio llevar a cabo un estudio de los posibles agentes que afectan a las pinturas, con un “análisis fotográfico de termografía, medición de la humedad, comprobación de la estructura y ventilación para procurar la mejor conservación de los frescos”, según Sancho.
Los estudios se realizarán por la Catedral en colaboración con el Instituto Valenciano de Conservación y, al cierre de esta edición de PARAULA, estaba previsto que comenzaran el miércoles 27.