L.A. | 12-04-2012
“Todo aquello que vosotros aspiráis en la vida para ser felices está en Jesucristo”. Así de rotundo se manifestó monseñor Carlos Osoro a los jóvenes que se congregaron en la Basílica de la Virgen de los Desamparados con motivo de la vigilia de oración.
La felicidad “no va a llegar por nuestra fuerza o por la de otros, la felicidad a la existencia humana llega solamente por Aquel que dio la vida por nosotros”, añadió el prelado.
Las tres negaciones
En su catequesis, tras proclamar con otros jóvenes el evangelio de la Pasión y Muerte de Cristo, el arzobispo de Valencia se refirió también a las tres negaciones de Pedro y aseguró que “cuando tenemos otros dioses que quieren ocupar nuestra existencia nos pasa como a Pedro, no reconocemos o negamos a quien de verdad nos da vida, fuerza, contenido, gracia, y el amor verdadero”.
También se refirió a la pregunta de Pilato a Jesús, “¿Y qué es la verdad?”, que “sigue, hoy quizá, más que nunca presente en los hombres”.
A este respecto, monseñor Osoro indicó que “hay múltiples verdades, verdades a medias, y algunas tan falsas que en estos momentos están cuestionando la vida misma del ser humano”.
Sin embargo, “Cristo es el rostro de la verdad, porque la verdad no es una idea, un concepto, sino una persona, el mismo Cristo, el Señor”, subrayó el prelado, que terminó animando a los jóvenes a la confianza plena en Dios. “No estamos solos, tenemos el amor más grande, hay alguien que nos ama y que ha dado la vida por nosotros, alguien que cambia nuestro modo de vivir y de pensar cuando entra en nuestra vida”, indicó.
La vigilia juvenil, en la que los participantes conmemoraron también la Pasión de Cristo al coincidir en Viernes Santo, culminó con una adoración de la cruz por los jóvenes, que fueron depositando, después de besar la imagen de Cristo crucificado, una vela sobre el altar de la Basílica.