L.B. | 28-09-2014
Imagen del relicario. J.PEIRÓ
Este domingo 28, monseñor Osoro entregará a la Basílica de la Virgen un regalo muy personal: una réplica del Santo Cáliz sostenida por dos ángeles de plata sobre una base en la que estará incrustada una reliquia de san Juan Pablo II (una ampolla con sangre del papa polaco), que le entregó el que fuera secretario particular del pontífice, el hoy cardenal arzobispo de Cracovia, Stanisław Dziwisz. El arzobispo electo de Madrid bendecirá y colocará este obsequio sobre el altar de la capilla del Santísimo Cristo del Feliz Tránsito a la Gloria, más conocida como ‘la Coveta’.
Réplica del Santo Cáliz
La réplica del Santo Cáliz de la Última Cena que se venera en la catedral de Valencia ha sido realizada en piedra y plata dorada. A los pies, en la peana, está la teca de plata decorada con elementos de fundición que albergará la reliquia de san Juan Pablo II. Sobre la tapa trasera de la teca se ha cincelado el escudo del papa santo.
También en la peana, se ha grabado el escudo y el lema episcopal de don Carlos ‘Per Christum et cum Ipso et in Ipso’ (‘Por Cristo, con Él y en Él’), así como la fecha. El conjunto está recubierto con una campana de cristal.
Piró Orfebres, empresa valenciana fundada en 1925, recibió el encargo de don Carlos en el mes de julio, según explica Mª José Piró. El diseño está inspirado en un relicario o expositor antiguo, del siglo XVII, de la Catedral que albergó el Santo Cáliz y que se perdió en la persecución religiosa del siglo pasado.