El cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, ha nombrado cuatro nuevos canónigos de la catedral de Valencia, los sacerdotes Benjamín Martínez y Fernando Enrique Ramón, que serán, respectivamente, canónigo prefecto de Pastoral y canónigo lectoral, y José Máximo Lledó y Juan José Garrido, canónigos de honor. Todos mantienen sus anteriores cargos.Además, ha nombrado nuevo rector de la Basílica de la Virgen de los Desamparados de Valencia al sacerdote Juan Melchor Seguí, párroco de Santa María de Ontinyent, que sustituirá a Jaime Sancho, quien ha sido rector desde el año 2017.

JOSÉ MÁXIMO LLEDÓ. Rector del colegio seminario de la presentación y Sto. Tomás de Villanueva

«El nombramiento que recibo lo tomo como un reconocimiento al Colegio Mayor-Seminario de la Presentación y Santo Tomás de Villanueva, para la formación de sacerdotes, del que soy rector. Al nombrar a los tres rectores, el arzobispo recupera una antigua tradición de la Diócesis de Valencia, que es precisamente que los tres rectores sean canónigos del Cabildo de la Catedral”.

José Máximo Lledó, de 78 años y natural de Torrelavega (Santander), fue ordenado sacerdote en Alaquàs en 1975.
Tras su ordenación, fue párroco de Camporrobles y Fuenterrobles, también de la parroquia del Beato Jacinto Castañeda de Benimaclet, y más tarde, durante varios años, de las parroquias valencianas San Vicente Ferrer y Nuestra Señora de la Buena Guía así como de Nuestra Señora de los Desamparados, de Nazaret.
Igualmente, fue arcipreste de la Avenida del Puerto y también capellán del Centro Penitenciario de Picassent.
Además, ha sido secretario de Colegios Diocesanos, miembro de la Comisión Diocesana de Enseñanza y Educación Católica del Arzobispado y fue delegado episcopal de Cáritas Diocesana de Valencia.
Lledó es actualmente delegado episcopal para el Clero, desde 2015, responsabilidad que mantendrá, además, junto a sus otros cargos como rector del Colegio Mayor-Seminario de la Presentación y Santo Tomás de Villanueva (desde 2003) y de la Real Iglesia El Salvador de Valencia (desde 2001). Asimismo, es el presidente de la Fundación Canónica ‘Mare de Déu del Innocents i Desamparats’ MAIDES, desde 2018.

JUAN JOSÉ GARRIDO ZARAGOZÁ. Rector del Colegio Seminario del Corpus Christi

«El nombramiento ha sido para mí una sorpresa. Ha sido algo inesperado. Agradezco al Arzobispo el detalle que ha tenido conmigo, que se haya acordado de mí y, en general, de los rectores de los Seminarios, ya que ha sido su voluntad hacer canónigos a todos los rectores de los Seminarios”.

Juan José Garrido Zaragozá, de 78 años y natural de Bétera, recibió la ordenación sacerdotal en Valencia en 1971. Es catedrático emérito de la Facultad de Teología de Valencia, de la que fue su decano y colegial perpetuo del Real Colegio-Seminario de Corpus Christi de Valencia, del que ha sido su rector en varias etapas y lo es en la actualidad.
Igualmente, fue becario y director del Colegio Mayor San Juan de Ribera de Burjassot y consiliario de Graduados (o Profesionales) de Acción Católica.
En la actualidad, es miembro del Consejo Presbiteral así como del Consejo Diocesano de Pastoral.
Garrido estudió Filosofía en Valencia, Lovaina y Roma, además de Teología en Valencia.
Entre su labor destaca la publicación de numerosas obras, entre las que figuran los libros Fundamentos noéticos de la Metafísica de Zubiri (Valencia, 1984); San Agustín, Breve introducción a su pensamiento(Valencia, 1990); El Pensamiento de los Padres de la Iglesia (Madrid, 1997); Sensibilitat actual i actitud evangelitzadora (Valencia, 2000); Pensar desde la fe (Valencia, 2005); Evangelio y cultura(Valencia, 2011); San Agustín (Valencia, 2015, nueva ed. aumentada).
También ha colaborado en revistas y libros sobre temas filosóficos de su especialidad, así como sobre cuestiones referentes al pensamiento cristiano en general.

BENJAMÍN MARTÍNEZ GALBAÑ. Párroco de San Andrés. Valencia

«Cuando me llamó el Sr. Arzobispo para comunicarme este nombramiento me quedé muy sorprendido de que hubiera pensado en mí y le manifesté mi disponibilidad a obedecer, como siempre he querido hacer, a la Iglesia. Siento un gran agradecimiento al Señor y a D. Antonio por esta nueva misión tan inmerecida”.

Benjamín Martínez Galvañ, de 59 años, es párroco de la iglesia de San Andrés de Valencia desde hace 18 años y profesor de Historia de la Iglesia en el Instituto Superior de Ciencias Religiosas de la Facultad de Teología.
Nació el 12 de diciembre de 1962 en la localidad alicantina de Aspe y fue ordenado sacerdote el 1 de junio de 1991 por el entonces Arzobispo, monseñor Miguel Roca Cabanellas.
Licenciado en Filosofía y Letras, especialidad en Historia, y con estudios acabados de Licenciatura de Teología, comenzó su labor pastoral como párroco en La Vall de Laguart, Famorca, Castell de Castells y Parcent, en la comarca de La Marina, de 1991 a 1996; y de San Pedro Apóstol, de Buñol, de 1996 a 2004. Desde 2004 es párroco de San Andrés, en la calle Colón de Valencia.
Igualmente, ha sido miembro del Consejo del Presbiterio y del Colegio de Consultores. En 2019 fue nombrado arcipreste del arciprestazgo “Santo Tomás de Villanueva”.
También fue miembro de las Comisiones Diocesanas del Itinerario Diocesano de Renovación (IDR) y del Itinerario Diocesano de Evangelización (IDE), y profesor del Instituto Diocesano de Ciencias Religiosas (IDCR) en las sedes de Chiva-Turís y Valencia.

FERNANDO RAMÓN CASAS. Rector del Seminario Mayor La Inmaculada

«Quiero manifestar mi agradecimiento a la Iglesia de Valencia y a D. Antonio Cañizares por este nombramiento. Lo recibo con el deseo de seguir sirviendo a nuestra Iglesia, desde el Seminario y ahora también desde el cabildo de la Catedral. Me pongo a disposición del cabildo con deseo de aprender esta nueva tarea que se me encomienda y de aportar lo que esté en mi mano para bien de la Iglesia. Confío en la amistad y en la acogida de todos los canónigos que me han precedido en esta responsabilidad y estoy convencido del enriquecimiento que será para mi ministerio esta nueva etapa. Espero poder seguir viviendo gozosamente la fraternidad sacerdotal, como he hecho con mis compañeros sacerdotes, empezando por mis condiscípulos a los que aprecio y admiro, y con todos aquellos con los que he tenido ocasión de compartir tareas en el ministerio sacerdotal. Agradezco también a los formadores del seminario su apoyo incondicional, especialmente ahora en este nuevo servicio”.

Fernando Enrique Ramón Casas, de 55 años y rector del Seminario Mayor La Inmaculada de Moncada desde 2011, es miembro del Colegio de Consultores desde el año 2015.
Nació en Valencia el 15 de julio de 1966, aunque ha vivido siempre en Xirivella, donde fue feligrés de San Francisco de Paula. Fue ordenado sacerdote el 28 de mayo de 1994 por el entonces Arzobispo, el cardenal Agustín García-Gasco.
Su primer nombramiento fue como párroco de Benimarfull, Alquería de Aznar, Benillup y Almudaina. Posteriormente, amplió estudios en Roma, en donde obtuvo la Licenciatura en Sagrada Escritura en el Pontificio Instituto Bíblico y, a su regreso, fue nombrado vicario parroquial de San Nicolás, del Grau de Gandia.
Igualmente, es profesor de la Facultad de Teología de Valencia desde el curso 2007-2008, así como profesor de acadio de la Escuela de Lenguas bíblicas y orientales.
En junio de 2011 fue nombrado rector del Seminario Mayor La Inmaculada de Moncada por el entonces Arzobispo, el cardenal Carlos Osoro, tras dos años ocupando el cargo de vicerrector, y también desde ese año es capellán del convento de Santa Maria de los Desamparados, de las Oblatas de Cristo Sacerdote, en Moncada.

Juan Melchor Seguí, nuevo rector de la Basílica de la Virgen de los Desamparados

«Para mí es todo un honor y me honra que el Arzobispo haya confiado en mí para este servicio tan importante para toda la diócesis”, ha asegurado el sacerdote Juan Melchor Seguí, párroco de Santa María de Ontinyent desde el año 2006. “Asumo este nuevo servicio con mucha ilusión como siempre cuando la Iglesia me ha encomendado algún servicio o algún ministerio pero también con preocupación porque pienso que es una responsabilidad y uno siempre piensa si estará a la altura de las expectativas”.

Melchor Seguí ha destacado que “la Basílica es un lugar de mucha proyección donde prácticamente todos los creyentes valencianos pasan por ahí y evidentemente, como en todos los lugares donde la Iglesia me ha enviado, lo quiero hacer lo mejor posible en el servicio a la diócesis, y también a nuestra Madre, a nuestra patrona y más en un año tan especial como este en el centenario, un Año Mariano, un Año Santo”. “Evidentemente esto también produce un cierto temblor a la persona pero realmente yo confío en el Señor y en la Santísima Virgen y también en la confianza que ha depositado en mí el Cardenal”, ha manifestado.

Por otro lado, también ha afirmado tener “nostalgia porque llevo 16 años en Ontinyent, yo soy también de la Vall d’Albaida, por el servicio a la vicaría episcopal y a los sacerdotes que ha sido muy rico, muy intenso y muy bonito y cuando uno deja una cosa siempre tiene morriña o nostalgia pero a la vez con mucha ilusión en dedicarme ahora por completo a la Basílica y a la gran devoción que los valencianos sentimos por la patrona”.

Asimismo, ha indicado que es “es un cambio de la montaña a la ciudad, por decirlo de alguna manera, y paso a dedicarme por completo a todo lo que significa la Basílica que ya me estoy dando cuenta, poco a poco, que es mucho y tiene muchas vertientes, además del culto y la devocional, la evangelizadora, y después, evidentemente, la caritativa”. “El título Desamparados nos dice que la dimensión caritativa de esta advocación mariana es fundamental y primordial”, ha añadido.

Juan Melchor Seguí Sarrió nació en Albaida en 1965 y fue ordenado sacerdote en 1994. Su primer nombramiento como párroco fue en Benidoleig, Benimeli y Sanet y Negrals. Después pasó a ser párroco de la Asunción de Nuestra Señora de Pego y arcipreste de les Valls de Pego y profesor del Instituto Diocesano de Ciencias Religiosas en Gata de Gorgos.
Ya en 2006 fue nombrado párroco de Santa María de Ontinyent, es el sacerdote que más tiempo ha estado la parroquia más antigua de la ciudad, desde la posguerra. También ha ejercido como arcipreste y desde 2016 era el vicario episcopal de la Vicaría VI. Además en 2019 celebró en Ontinyent sus bodas de plata sacerdotales y desde 2020 es miembro del Consejo Presbiteral y del Consejo Diocesano de Pastoral.