❐ C.ALBIACH | 21.07.2022

El 25 de julio la Iglesia celebra la fiesta del Apóstol Santiago, patrón de España. Hacia su tumba, que se venera en la catedral de Santiago de Compostela, peregrinan cada año miles de peregrinos que toman alguno de los múltiples caminos que llegan hasta del Santo. Estas peregrinaciones aumentan cuando se celebra el Año Santo o Año Jubilar Compostelano, un tiempo de gracia especial para lanzarse a la aventura de hacer el Camino de Santiago. Aunque Año Santo fue 2021 este año hay otra oportunidad, ya que la Santa Sede concedió un año prórroga dadas las dificultades de la pandemia.

Emprender el Camino de Santiago es toda una experiencia de fe que se conjuga con el deporte, la cultura, la naturaleza y el encuentro con los demás peregrinos. Haciendo referencia al lema del Año Santo, ‘Sal de tu tierra’, el papa Francisco invitaba al comienzo del Año Santo a vivir esta experiencia: “Es la voz del Señor que nos llama y, como peregrinos, la acogemos en actitud de escucha y de búsqueda, emprendiendo este viaje al encuentro con Dios, con el otro y con nosotros mismos”.
Para llegar a la tumba del apóstol hay múltiples caminos incluso uno, el conocido como de Levante, que parte de la ciudad de Valencia. En Valencia, escojas el camino que escojas, se puede obtener la credencial de peregrino en la sede de la Asociación Amigos del Camino de Santiago Comunidad Valenciana. Además, en la iglesia de San Juan del Hospital tras la misa diaria de 19 h. hacen la bendición del peregrino.

Este año y dada la normalización tras la pandemia se han recuperado las peregrinaciones a Santiago aunque aún no a números de la pandemia. Desde la asociación valenciana apuntan que este año llevan entregadas 4.700 credenciales y en todo el año pasado se repartieron 4.000 credenciales. “Este año ya se han abierto más albergues y la gente se empieza a animar un poco más”, destaca su presidente, Ricardo Lequerica.

Independientemente de si se hace el Camino de Santiago a pie se puede ganar el Jubileo visitando la tumba del apóstol, rezando una oración que puede ser el Padrenuestro o el Credo, recibir el sacramento de la penitencia y comulgar en la eucaristía. Si se hace al menos los últimos 100 km. a pie sí se puede conseguir la ‘Compostela’ que acredita la peregrinación.