Eduardo Martínez | 26-04-2012

El purpurado guineano en la Facultad de Teología. (Fotografía: Alberto Sáiz)


El cardenal Robert Sarah, presidente del Pontificio Consejo ‘Cor Unum’ (‘un solo corazón’), animó el pasado martes en Valencia a los sacerdotes a poner de relieve “la centralidad de Cristo” en sus homilías no sólo con palabras, sino también con “el tono, las expresiones, la alegría, la sencillez y el entusiasmo”, ya que “los fieles perciben el amor del celebrante a Cristo” en todo ello.
El purpurado guineano visitó Valencia para pronunciar una conferencia en la Facultad de Teología ‘San Vicente Ferrer’ sobre ‘La Palabra de Dios en la vida del sacerdote: oración y homilía’. En ella aconsejó también a los presbíteros evitar “homilías genéricas y abstractas que oculten la sencillez de la Palabra de Dios, así como inútiles divagaciones que corren el riesgo de atraer la atención más sobre el predicador que sobre el corazón del mensaje evangélico”.
En este sentido, “debe quedar claro a los fieles que lo que interesa del predicador es mostrar a Cristo, que tiene que ser el centro de toda homilía”, subrayó el cardenal Sarah, que apoyó su disertación principalmente en la exhortación apostólica del papa Benedicto XVI ‘Verbum domini’ sobre la Palabra de Dios en la vida y en la misión de la Iglesia. “El sacerdote procurará con sus palabras –recordó también- que los fieles puedan descubrir el rostro amable de Cristo, que se encuentra en el Evangelio, que oigan y pongan en práctica las inspiraciones que el Espíritu Santo suscita en la proclamación de la Palabra de Dios”.
Para poder desarrollar ese modo de predicar, el purpurado recomendó a los sacerdotes dedicar un “tiempo de preparación a la homilía” que incluya un “estudio meditativo íntimamente unido a la oración personal”. De hecho, “el predicador tiene que ser el primero que tiene que dejarse interpelar por la Palabra de Dios que anuncia”. En este punto, citó a san Agustín al añadir que “pierde tiempo predicando exteriormente la Palabra de Dios quien no es oyente de ella en su interior”.
Por otra parte, exhortó a que, además de preparar con “especial atención” la homilía dominical y la de las solemnidades, “no se deje de ofrecer también, cuando sea
posible”, durante las misas del resto de días “breves reflexiones apropiadas para ayudar a los fieles a acoger y hacer fructífera la palabra escuchada”.
Por todo ello, el purpurado animó a todos los cristianos, y en particular a los sacerdotes, a leer asiduamente la Biblia, a profundizar en su conocimiento y a dejarse interpelar por la Sagrada Escritura.
Con su conferencia, quedó clausurado el ciclo de ‘Diálogos de Teología Almudí’, organizado por la Biblioteca Sacerdotal Almudí y la Facultad de Teología de Valencia. El ciclo ha girado en torno a la exhortación apostólica ‘Verbum domini’. En la jornada de clausura estuvo también el subsecretario del Pontificio Consejo ‘Cor Unum’, monseñor Segundo Tejada, y el vicario episcopal de Acción Caritativa y Social, Vicente Serrano, que representó al arzobispo de Valencia, monseñor Carlos Osoro, quien no pudo acudir por encontrarse en la Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal. También participaron el decano de la facultad, Juan Miguel Díaz Rodelas, y el párroco de San Josemaría e integrante de la Biblioteca Sacerdotal Almudí, Jorge Molinero.
Descárguese la conferencia completa
“Algunas Cáritas en Europa han perdido su identidad cristiana y en la Santa Sede estamos trabajando para recuperarla», dijo el cardenal Sarah a PARAULA en una entrevista al término de su conferencia. Lea la entrevista íntegra en la edición escrita de PARAULA