Durante el viaje de regreso a Italia, el Papa dio la posibilidad de hacer preguntas a los periodistas que viajaban con él en el avión. Las preguntas fueron improvisadas, así como las respuestas del Papa Francisco que contestó a todas las cuestiones planteadas, desde las relativas a su seguridad personal a las relacionadas con la Curia, el viaje a Brasil, su colaboración con Benedicto XVI o la situación de los divorciados que se han vuelto a casar.
Algunas de sus respuestas, sacadas de contexto, han dado lugar a especulaciones. Transcribimos a continuación literalmente algunas de las respuestas del Papa Francisco tal y como lo ha publicao el portal de noticias news.va.
Una periodista brasileña, Patricia Zorzan, pregunta al Papa: “La sociedad ha cambiado, los jóvenes han cambiado, y vemos en Brasil muchos jóvenes. Usted no ha hablado sobre el aborto, el matrimonio entre personas del mismo sexo. En Brasil han aprobado una ley que amplía el derecho al aborto y ha permitido el matrimonio entre personas del mismo sexo. ¿Por qué no ha hablado sobre esto?”
El Papa Francisco responde: “La Iglesia se ha expresado ya perfectamente sobre eso. No era necesario volver sobre eso, como tampoco hablé sobre la estafa o la mentira, u otras cosas en las cuales la Iglesia tiene una doctrina clara”.
La periodista insiste: “Pero es un asunto que interesa a los jóvenes…”
El Papa Francisco: “Sí, pero no era necesario hablar de eso, sino de las cosas positivas que abren camino a los chicos, ¿no es cierto? Además los jóvenes saben perfectamente cuál es la postura de la Iglesia”.
De nuevo la periodista Patricia Zorzan: “¿Cuál es la postura de su Santidad, puede decírnosla?”
El Papa Francisco: “La de la Iglesia. Soy hijo de la Iglesia”.
Respecto a la otra cuestión de la que se ha hablado tanto, he aquí lo que se dijo: Ilze Scamparini preguntó cómo piensa afrontar el Papa la cuestión de la supuesta lobby (grupo de presión a favor de algo) gay del Vaticano. El Papa responde: “Mah! Se escribe mucho sobre la lobby gay. Yo aún no encontré a nadie en el Vaticano que me diera el documento de identidad con “gay” escrito en él. Dicen que los hay. Creo que cuando alguien se encuentra con una persona así, debe distinguir el hecho de ser una persona gay, del hecho de hacer una lobby, porque no todas las lobbies son buenas. Eso es malo. Si una persona es gay y busca al Señor y tiene buena voluntad, ¿quién soy yo para juzgarla? El catecismo de la Iglesia Católica explica de un modo muy bello esto, y dice: ‘No se debe marginar a estas personas por esto, deben ser integradas en la sociedad’. El problema no es tener esta tendencia, no, debemos ser hermanos. El problema es hacer lobby de esta tendencia, lobby de avaros, lobby de políticos, lobby de los masones, tantas lobbies. Ese es el problema más grave para mí. Y le agradezco mucho esta pregunta”.
Los periodistas preguntaron también muchas otras cosas a lo largo de la hora y media que duró la “entrevista” colectiva con el Papa Francisco. Presentamos un resumen de lo más significativo:
Por cuanto se refiere a la participación de las mujeres en la Iglesia, Francisco dijo que la cuestión de la ordenación fue abordada de forma definitiva por Juan Pablo II con un no, pero, ha recordado que “María es más importante que los apóstoles… y así, la mujer en la Iglesia, es también mas importante que los obispos y los sacerdotes…. Hay que progresar en la explicitación del papel y del carisma de las mujeres en la Iglesia…. No tenemos todavía una teología profunda de la mujer en la Iglesia”.
Tampoco ha eludido el Papa el tema de los sacramentos a los divorciados que se han vuelto a casar. “Los divorciados pueden acceder a los sacramentos. El problema atañe a los que han celebrado una segunda unión, que no pueden recibir la comunión. Creo que es necesario estudiar este problema dentro del marco de la pastoral matrimonial. Uno de los temas de consulta con el Consejo de cardenales con el que nos reuniremos en octubre es cómo proseguir en la pastoral matrimonial, y este problema se planteará allí. También ha estado conmigo hace unos días el Secretario del Sínodo de los Obispos, para el tema del próximo sínodo y… hablando… hemos visto este tema antropológico: cómo ayuda la fe a la planificación de la persona, de la familia y llegar a la pastoral matrimonial… Estamos en camino hacia una pastoral matrimonial más profunda”.
Por otra parte, Francisco dijo que estaba contento de su primer viaje al extranjero como Papa: “El corazón de los brasileños es grande; es un pueblo amable… que incluso cuando sufre encuentra un camino para buscar el bien por algún sitio. Y esto sienta muy bien: es un pueblo alegre, que ha sufrido mucho….El viaje ha sido muy hermoso y espiritualmente me hizo un gran bien… Encontrarse con la gente siempre sienta bien… Podemos recibir tantas cosas de los demás..”.
Por cuanto respecta a su seguridad, comentó que no había habido ningún incidente en estos días en Río de Janeiro y que todo era espontáneo. “Con menos seguridad pude estar con la gente, abrazarles, sin coches blindados… Y la seguridad es fiarse de un pueblo… Sí, hay siempre el peligro de que haya algún loco que haga algo; pero también está el Señor que protege ¿eh?. Construir un espacio blindado entre el obispo y el pueblo es una locura y, entre locura y locura, yo prefiero ésta”.
También reiteró que prefería residir en Santa Marta porque “no puedo vivir solo o con un grupito. Necesito a la gente, encontrarla, hablar con ella… Cada uno tiene que vivir como el Señor quiere que viva. Pero la austeridad, la austeridad general, es necesaria para todos los que trabajamos al servicio de la Iglesia”.
En otro orden de cosas explicó el contenido del maletín que ha llevado consigo en este viaje.”No llevaba la llave bomba atómica. Llevo la cuchilla de afeitar, el breviario, la agenda, un libro para leer… estoy leyendo uno sobre Santa Teresita de la que soy muy devoto… Yo he llevado siempre mi maletín cuando viajo… Es normal. Tenemos que ser normales”.
Igualmente, respondiendo a una pregunta sobre las comisiones que ha instituido para la reforma del IOR (Instituto para las Obras de Religión, conocido como el “banco vaticano”) y el caso de monseñor Scarano, -responsable del Servicio de Contabilidad Analítica de la Administración del Patrimonio Apostólica de la Santa Sede (APSA) arrestado a finales de junio por las autoridades italianas en el contexto de una investigación sobre corrupción y estafa- dijo que había formado estas comisiones para reformar y sanear el IOR; y que algunos le aconsejaban que fuera un banco ético, un fondo de ayudas o incluso que se cerrase. “Me fío del trabajo de las personas de la comisión… Lo cierto es que la transparencia y la honestidad deben ser los criterios en que se inspire ese organismo… Sí, hay un monseñor en la cárcel y si está allí no es porque se pareciese a la beata Imelda… Me duelen estas cosas que causan tanto escándalo…Pero en la Curia hay también tantos santos… aunque haya alguno que tanto no lo es… Y estos últimos son los que hacen más ruido… Todos sabéis que hace más ruido un árbol que cae que un bosque que crece”.
Hablando de la presencia de Benedicto XVI en el Vaticano ha afirmado: “Es como tener al abuelo en casa, pero un abuelo sabio. Cuando en una familia el abuelo está en casa, es venerado, amado y escuchado. Él es un hombre muy prudente, no se inmiscuye nunca. Yo le he dicho muchas veces: “Santidad, reciba a la gente, haga su vida, venga con nosotros”.. Sí, vino, para la inauguración de la estatua de San Miguel… Si, es como tener al abuelo en casa, es un poco como un padre. Si yo tuviera una dificultad o algo que no entiendo, le llamaría por teléfono para preguntarle: ¿”Dígame, puede hacer esto o aquello?”. Y cuando fui a hablar para hablar de aquel problema tan grande de Vatileaks, me explicó todo con gran sencillez”.