❐ CARLOS ALBIACH | 24.02.2022
Con la nueva ley de eutanasia ha aumentado entre los católicos la preocupación de cómo será el proceder en el final de su vida por parte de los médicos y el hospital. Para que este proceso sea conforme a la voluntad de cada uno es importante hacer un testamento vital o un Documento de Voluntades Anticipadas (DVA), tal y como se denomina en la Comunidad Valenciana.
La Iglesia en España desde la Conferencia Episcopal Española ha animado a los fieles a presentar este documento para que preserve la voluntad de cada uno en el caso de vivir una situación en la que se pierde la voluntad intelectual. El Arzobispado de Valencia, a instancias del arzobispo de Valencia, el cardenal Antonio Cañizares, ha trabajado a fondo este tema y tras conversaciones con la Conselleria de Sanidad propone a los fieles un documento que cumple con la legislación y en el que se recoge la forma cristiana de vivir estos momentos.
El pasado sábado 19 el XVIII Encuentro Diocesano de Pastoral de los Enfermos, celebrado en el Centro Arrupe, la delegación diocesana de Pastoral de Enfermos y Mayores explicó a fondo este documento y cómo proceder para registrarlo. Un paso previo a una campaña que llegará a todas las parroquias. El documento y toda la información adicional se puede descargar en la web del Arzobispado (archivalencia.org).
En el acto participó el delegado de Pastoral del Enfermo y Mayores, Luis Sánchez, y el letrado del servicio Jurídico-Civil del Arzobispado, Daniel Calabuig. Sánchez resaltó que rellenar el DVA “es una medida muy sencilla para defenderse frente a la eutanasia y a la vez dar testimonio de la fe cristiana”. Además, Calabuig, que presentó un caso práctico, destacó que las cifras en España de personas que había presentado el DVA eran muy bajas y destacó que desde la Iglesia “hay muchas herramientas, entre ellas las jurídicas, para defender la vida de cada uno, en medio de una cultura de la muerte”.