L.B. | 22-11-2019
El sacerdote Jesús Girón presentó el pasado lunes 18 en la Facultad de Teología de Valencia su libro ‘Maestro, ¿dónde vives? (Jn 1,38)’, de la editorial Verbo Divino. El libro es la publicación de la tesis doctoral que defendió en Roma hace dos años.
– ¿A quién va dirigido este libro?
– Cuando escribí la tesis quería que una persona con una formación normal pudiese leerla y comprenderla. Es cierto que, al tratarse de una tesis doctoral, hay que mantener un rigor científico, ya que va dirigido a estudiosos de la Biblia, y hay algunas partes que son más áridas, pero cada parte va acompañada de una síntesis teológica más asequible, que ayuda a comprender mejor todo lo analizado. Así que podemos decir que es ‘apta para todos los públicos’.
– Es curioso realizar una tesis doctoral sobre una palabra, ‘dónde’. ¿Cómo surgió la idea?
– Fue la propuesta de mi director de tesis. A mí también me resultó muy sorprendente, sobre todo, cuando me dijo cuál sería la primera cita a analizar: “Maestro, ¿dónde vives?” (Jn 1,38), un texto especialmente significativo para mí en mi proceso vocacional.
En realidad, algunos estudiosos ya habían puesto de relieve la importancia del adverbio interrogativo de lugar ‘dónde’, junto a otras referencias topográficas, y su sentido metafórico en el Evangelio de Juan. La idea era, pues, hacer un estudio más exhaustivo y completo de todas las citas en las que aparecía el adverbio para verificar la intuición señalada por aquellos estudiosos del Evangelio de Juan.
– ¿Qué significado tiene la palabra ‘dónde’ en el evangelio?
– La tesis trata de mostrar que el adverbio interrogativo de lugar ‘dónde’ se usa, no sólo para preguntar por un lugar físico (dónde está Jesús o a dónde va Jesús), sino, que la pregunta hace referencia a la identidad de Jesús que se va revelando progresivamente a lo largo del Evangelio de Juan.
– ¿Cómo ha organizado el trabajo de investigación?
– He organizado las 18 citas en las que aparece el adverbio ‘dónde’ según los personajes. Para ello, he usado dos criterios que son clave en el Evangelio de Juan: la ‘búsqueda’ y la ‘fe’. El primer grupo de citas se refiere a los personajes que buscan a Jesús desde la fe (‘tesis’). El segundo, a los que buscan a Jesús desde la falta de fe o, incluso, la hostilidad (‘antítesis’). Quedaría un tercer grupo de citas: aquellas en las que aparece el uso del adverbio en labios de Jesús (‘síntesis’). La identidad de Jesús se va revelando a raíz de cada pregunta, y es captada, según se busque con fe o sin ella.
– ¿Cuáles son los datos que le han sorprendido más de los que ha descubierto?
– Antes de empezar a escribir la tesis leí detenidamente el Evangelio de Juan, en castellano y en griego, todo seguido. Entonces descubrí algo que nunca me había llamado la atención: las primeras palabras que Jesús pronuncia al inicio de su ministerio público son una pregunta dirigida a los primeros discípulos: “¿Qué buscáis?” (Jn 1,38a). Por otro lado, casi al final del evangelio, las primeras palabras del Resucitado a María Magdalena serán: “¿A quién buscas?” (Jn 20,15a). Al inicio del Evangelio de Juan aquellos primeros discípulos respondieron a Jesús con otra pregunta: “¿Dónde vives?” (Jn 1,38b). Y al final, la respuesta de María Magdalena fue también otra pregunta: “Dime dónde lo has puesto” (Jn 20,15b).
– ¿Qué le ha aportado como creyente, como cristiano este estudio?
– A pesar de la similitud de estas dos preguntas realizadas por Jesús, hay un pequeño detalle que las diferencia notablemente. Se trata del paso del pronombre interrogativo neutro singular (“¿qué buscáis?”) al masculino singular (“¿A quién buscas?”). Este sutil cambio pone de relieve la progresión de una búsqueda inicial abstracta a una búsqueda final concreta. En el fondo, todo el Evangelio de Juan muestra que la búsqueda profunda del hombre está orientada hacia la persona de Jesús. No hay nada más importante que saber dónde está Jesús, quién es Jesús y permanecer junto a él.
– ¿Cómo podemos aplicar sus enseñanzas a nuestra vida del día a día?
– Cuando los primeros discípulos preguntan “¿Dónde vives?”, Jesús no les envía por Whatsapp la ubicación. Les dice: “Venid y veréis”. Es una invitación a hacer experiencia personal de algo grande que les va a cambiar la vida. El evangelista dice que “permanecieron con él” (Jn 1,39). En una sociedad en la que andamos tan inquietos, sin parar, siempre agobiados por lo urgente, se nos invita a tomar conciencia de lo que es esencial, y detenernos un momento y permanecer con Jesús para compartir su intimidad, para conocerle, amarle y seguirle más.