Cientos de vecinos y devotos acudieron a la misa de campaña en Benigànim. FOTO: V.GUTIÉRREZ

❐ C.A. | 26.01.2023
El 21 de enero para la localidad de Benigànim es sinónimo de fiesta grande, ya que recuerdan a una de sus hijas ilustres, Josefa Teresa Albiñana Gomar, conocida por todos como la beata Inés, religiosa agustina descalza que fue la primera mujer valenciana en ser elevada a los altares cuando fue beatificada hace más de 130 años. Una cita que no solo reúne a sus vecinos, ya que sea en autobús como en coches particulares también llegan vecinos y devotos de otras localidades de la comarca.

La fiesta comenzó bien pronto, ya que a las siete de la mañana ya se celebró la primera misa. Antes, de madrugada ya se oían los cohetes y la música. Sin embargo, la misa solemne que más fieles reunió es la que se celebró en la plaza de la Beata y que fue presidida por el arzobispo de Valencia, monseñor Enrique Benavent. Allí también estuvieron presentes las autorides municipales y el grupo de festeros.

Durante la homilia Mons. Benavent mostró su alegría por presidir de nuevo esta fiesta, a la que ya había acudido en otras ocasiones como obispo auxiliar de Valencia u obispo de Tortosa: “amb molta alegria vinc a venerar la memòria de la beata, un dels fruits de santedat que Déu ha regalat a la nostra diòcesi”. “Un regal del Senyor que ha sigut acollit i reconegut pel poble cristià que des de el moment de la seua mort ja la va tindre per santa”, añadió en valenciano.

Además, aseguró que “en este moment de la meua vida, jo també com un peregrí, vull demanar-li a la beata Inés per les necessitats de la nostra diòcesi suplicant que em concedisca la mateixa saviesa de les coses de Déu que ella va tindre com una gràcia especial del Senyor”.

Por otro lado, afirmó que “la beata Inés a todos nos debe hacer pensar si lo que valoramos en nuestra vida es lo que tiene valor a los ojos de Dios”. “Lo verdaderamente importante, seguramente y muy a menudo no son aquellas cosas a las que nosotros le damos valor, sino las cosas que tienen valor a los ojos de Dios”, destacó.

Asimismo, manifestó que “Inés de Benigànim nos enseña que en nuestra vida hemos de hacer el esfuerzo de ver y de valorar las cosas no con los criterios humanos sino con los ojos de Dios”. “Que el amor de Inés en el Señor nos impulse a no olvidar que el camino de vida de todo cristiano no es otro que un crecimiento en la amistad del Señor”, ha añadido. “La himilitat i la senzillesa es el camí de la santedat”, concluyó.

Tras la misa la fiesta continuó y ya por la tarde tuvo lugar la procesión con la imagen de la beata, que recorre algunas calles de la localidad. Una procesión única y muy llamativa, puesto que para este recorrido, los devotos adornan sus balcones y calles y a lo largo del trayecto los propios vecinos y feligreses escenifican los milagros atribuidos a la beata.

Visita a la Mare de Déu
La imagen procesional de la beata Inés será llevada el sábado 28 de enero a Valencia, a la Basílica de la Virgen de los Desamparados, para devolver la visita que realizó el pasado mes de julio la imagen peregrina de la Mare de Déu a la localidad de Benigànim, dentro de su recorrido por poblaciones y santuarios de la diócesis con motivo del Año Jubilar del Centenario de su Coronación.

Está previsto que la Basílica acoja ese día una misa a las 17:30 horas, en presencia de la imagen de la beata, junto a la imagen de la Virgen de los Desamparados que preside el Altar Mayor.

Precisamente, la imagen de la beata Inés fue elaborada por el mismo escultor de la imagen peregrina de la Virgen de los Desamparados, Octavio Vicent.