La comisión coordinadora del Congreso Diocesano de Laicos, tras presentarlo al Arzobispo el martes. FOTO: A.SÁIZ

B.NAVA | 10.06.2021
Al cierre de esta edición de PARAULA, se le presentaba al cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, el proyecto del Congreso Diocesano de Laicos, fruto del Sínodo cuya Asamblea concluyó hace tres semanas y continuación prevista del Congreso nacional en Madrid de febrero de 2020. El propio Cardenal aseguraba días después de clausurar la Asamblea Sinodal que “los fieles cristianos laicos vais a ser los primeros en aplicar el Sínodo Diocesano, porque sois muy conscientes de que nos urge evangelizar de nuevo como en los primeros tiempos, y, además, mantenéis en vuestro recuerdo del Congreso nacional de apostolado seglar, ‘Pueblo de Dios en salida’, que apremia el llevar a feliz puerto sus conclusiones aquí en nuestra querida Diócesis de Valencia”.

Con este propósito, el próximo mes de noviembre, Valencia celebrará su propio Congreso Diocesano de Laicos, que bajo el lema ‘Caminando juntos hacia un renovado Pentecostés’, pretende dar continuidad al congreso nacional celebrado en Madrid en el mes de febrero del pasado año. Abriendo, así, un camino que ayude a acompañar y dinamizar el apostolado de los laicos en la diócesis valentina.

“El congreso celebrado en Madrid, fue un punto de partida para incardinar, en nuestra diócesis, aspectos relevantes y propios que se deben atender, reflexionar y, en definitiva, discernir. Desde aquel marco, verdaderamente ambicioso, queremos aterrizar en nuestra realidad. Para ello, disponemos de todo ese trabajo que el Sínodo nos ofrece y que está a punto de ver la luz y, por ello, en comunión con nuestros pastores, queremos ayudar a ser luz”, aseguran desde la organización.

La de Madrid, “fue una experiencia que nos marcó, nos impactó, los que tuvimos el privilegio de haberlo vivido no podíamos quedárnoslo para nosotros; un sentimiento de hacerlo extensivo nos invadía y esta vivencia no podía quedar limitada geográficamente a Madrid”, explican el matrimonio formado por Inma Ros y Guillermo Prado, coordinadores del congreso.

La pandemia, provocada por el coronavirus, y las diferentes medidas sanitarias adoptadas a lo largo de estos meses “paralizó todo y a todos”, comentan, “pero ese sentimiento estaba intacto y ya desde el último trimestre del año pasado el Consejo Diocesano de Laicos asumió decididamente trabajar con inusitada ilusión en el proyecto de un Congreso Diocesano de Laicos”.

Con el obispo auxiliar, monseñor Arturo Ros, liderando el proyecto y con el total apoyo del propio Cardenal, “empezamos a creer que de un ilusionante proyecto teníamos que pasar a una realidad”, aseguran Inma y Guillermo. Una realidad constatada en el trabajo realizado en los ya cuatro años de existencia del Consejo de Laicos y que con las visitas a las diferentes vicarias territoriales, “reuniéndonos con los laicos de las parroquias que las componen, acompañados por sus párrocos, arciprestes y su vicario, nos permitieron disponer de una información maravillosa pero, sobre todo, real. Todo ello, nos permite decir, aún más, exclamar: ¡laico es tu momento!”.

En paralelo “hemos vivido un tiempo “especial” con la celebración de un Sínodo Diocesano que hace tan solo unas semanas se clausuraba. Esperamos con impaciencia su publicación y muy atentos a su aplicación. Entre tanto, no tenemos duda, que uno de sus primeros frutos será la celebración del Congreso Diocesano de Laicos el próximo mes de noviembre”.