El gran acontecimiento de los últimos años, el Sínodo diocesano, señaló la urgencia de desarrollar “una gran acción evangelizadora-misionera”, en palabras del Arzobispo de Valencia, cardenal Antonio Cañizares, “que despierte y espabile a todos”. La Diócesis celebra también otro acontecimiento histórico, como es el Año Jubilar Mariano, con ocasión del Centenario de la Coronación canónica de la Mare de Déu dels Desamparats. De manera providencial, con esta confluencia, despierta pues, un año para la gran Misión popular diocesana, en la que todos somos necesarios y corresponsables. Bajo la presidencia del Arzobispo de Valencia, el cardenal Antonio Cañizares, con la presencia del obispo auxiliar Arturo Ros, el vicario general Vicente Fontestad, el canciller secretario José Francisco Castelló y numerosos asistentes entre vicarios episcopales, párrocos y laicos del Consejo de Pastoral, el vicario episcopal Jesús Corbí desgranó la planificación de esta gran Misión evangelizadora.
¿Una misión ahora?
El 8 de mayo, el Sr. Arzobispo abrió el Año Jubilar Mariano para la Diócesis, con ocasión del Centenario de la Coronación canónica de la Mare de Déu dels Desamparats, y anunció la celebración de una gran misión: “este Año Jubilar del Centenario ha de ser, como hemos dicho en el Sínodo diocesano, un año para la gran misión, una misión popular diocesana”.
La primera propuesta del Sínodo Diocesano nos urge a “llevar a cabo, cuanto antes, una gran acción evangelizadora-misionera que despierte y espabile a todos”.
Estamos en un momento de “cansancio y desánimo, que pudiera llevar a pensar que esta acción no es la más oportuna y aconsejable” pero podemos decir que la Providencia nos ha puesto delante la “hora de Dios” para llevar a cabo esta acción de la mano de la Virgen María, Mare de Déu dels Desamparats.
Dice el Papa Francisco que “María es creyente, discípula y misionera del Evangelio”, así nosotros en Valencia queremos dejarnos evangelizar por María, para ser como ella creyentes, discípulos y misioneros.
Nos ponemos manos a la obra en esta gran acción diocesana en la que todos somos necesarios y corresponsables. Están surgiendo iniciativas de renovación pastoral; con esta misión sumamos y ponemos nuestra creatividad al servicio del Espíritu Santo.
Él lo hace todo, y nosotros colaboramos con él para que cada uno pueda tener un encuentro con el Dios de la misericordia, con su amor, con su gracia. Pero la misión no solo será una respuesta personal a la gracia, también una experiencia “de comunión eclesial que es fundamento y meta de toda acción evangelizadora”.
Nuestra diócesis ha sido bendecida con una presencia singular de la Virgen María, a quien llamamos Mare de Déu, (Theotokos), pero que además encierra un gran contenido teológico y caritativo como Mare dels Desamparats. La gran devoción a la Mare de Déu sin duda ha favorecido y mantenido la fe en terres valencianes, por eso la misión diocesana podría llevar como título LA FE PER VÓS NO MOR. La Mare de Déu mantiene la fe y la caridad de su pueblo.
A quién se dirige
Todos somos los agentes y destinatarios de la misión, porque todo bautizado es discípulo y misionero, según enseña el papa Francisco.
Los destinatarios de este anuncio son todos. “Id al mundo entero y proclamad el evangelio a toda la creación” (Mc 16,15). Aprovecharemos todos los ámbitos para acercarnos y hacer la invitación:
- a todos los que se acercan a pedir sacramentos y que en su mayoría son alejados (novios, padres que piden el bautismo para sus hijos o la primera comunión)
- grupos de jóvenes que necesitan ser evangelizados y que pueden ser misioneros también para otros
- enfermos y sus familias
- cofradías y hermandades
- asociaciones de vecinos o culturales, fallas
- colegios, claustros de profesores, asociaciones de padres
- usuarios de Cáritas, internos de la cárcel
- residencias de ancianos y hospitales
- tanatorios y cementerios
- Movimientos y grupos cristianos que también se pueden haber enfriado en la fe
- Y particularmente todos los que nos encontremos “en los cruces de los caminos” (Mt 22,9) de la vida, los caminos del dolor, la soledad, el sufrimiento…
La sensibilidad de los misioneros, junto con los sacerdotes, sabrá reconocer y descubrir aquellas personas que están pasando una situación especial de sufrimiento y que pueden necesitar más escuchar la Palabra de amor del Señor y encontrarse con Él.
Éstos han de ser destinatarios prioritarios de la misión.
Quienes serán misioneros
El método para la misión va a ser la invitación personal, de tú a tú, para encontrarse con el Señor a través de la Virgen. Por eso se necesitarán “misioneros” que se preparen para visitar, invitar y acompañar a otros. Llamados de entre:
- agentes de pastoral de las parroquias, catequistas…
- Seminario diocesano y congregaciones religiosas
- movimientos
- alumnos del IDCR y profesores cristianos de colegios
- Universidad Católica
- Hermandades, Cofradías y asociaciones de fieles
- voluntariados de caridad y acción social
- agentes de pastoral de la salud
De todos estos ámbitos buscaremos personas que se sientan llamados a ser “misioneros”. Como los primeros discípulos,
“después de haber ayunado y orado” (Hc 13,2) serán enviados para la misión «los envió de dos en dos a los pueblos y lugares por donde Él iba a pasar» (Lc 10,1).
A los misioneros se les ofrecerá la preparación adecuada para que puedan hacer la invitación, acompañar al grupo y hacer el anuncio, para ser enviados a “patear” las calles, con el “reclamo” de la Mare de Déu que acompañará toda la acción. Una tarjeta con una invitación personalizada y estampa de la Mare de Déu puede ser el motivo para entrar en contacto con las personas e invitarlas a participar en un grupo que se reunirá tres veces para recibir el anuncio del Kerigma.
Estos encuentros concluirán con una oración penitencial y una celebración de la Eucaristía en las parroquias.
Contenidos de la misión
El contenido fundamental de la misión será el Kerigma, adaptado a la situación de los grupos (edad, nivel cultural, experiencia previa de fe…). Anunciar a Jesucristo que nos ama, nos perdona, nos salva y nos ofrece vida eterna. Para explicitar más este anuncio, los tres encuentros los dedicaremos al Padre, otro al Hijo y otro al Espíritu Santo y la Iglesia.
Habrá que preparar un material que sea muy didáctico, sencillo y cercano a la propia experiencia y realidad, para que los misioneros tengan recursos para los tres encuentros de grupo.
Como el contenido por excelencia de la misión es encontrarse con el Señor, durante el tiempo que dure hay que favorecer algún espacio de proclamación de la Palabra, oración, invitación a la adoración eucarística, el sacramento de la penitencia y la Eucaristía.
La misión ha de despertar también la caridad y preocupación por los más desamparados, por eso deberá propiciarse algún compromiso personal y del grupo para participar en alguno de los proyectos caritativos y sociales del Centenario.
Al final de la misión se ofrecerá algún itinerario de fe para los que quieran seguir, así como una preparación para la Confirmación de adultos, o el catecumenado de iniciación cristiana si hubiera algún no bautizado.
Hay que tener en cuenta que la misión es una acción extraordinaria en un tiempo extraordinario, con un inicio y una conclusión bien marcadas. No es un proceso largo de formación. Eso puede venir después.
Por ser una acción extraordinaria hay que privilegiarla sobre lo ordinario, pero sin desatenderlo.
Durante el curso en el que realizamos la misión habrá dos acciones para aprovechar de manera transversal a todo lo que se vaya haciendo: las cuatro catequesis sobre la Virgen y la visita de la imagen peregrina de la Virgen por vicarías territoriales. Según el momento de la misión en el que coincida esta visita se aprovechará.
¿Cómo y cuándo?
Preparación, consulta y programación
Junio-Septiembre: en Consejos diocesanos, arciprestazgos, consejos parroquiales…
8 septiembre: Apertura del tiempo de misión en toda la diócesis
Octubre: El Sr. Arzobispo propone el camino a seguir en la misión y se publica debidamente con los materiales necesarios.
Tiempo de la oración y la llamada
Octubre-Noviembre: Comunidades contemplativas serán invitadas a la oración. Se fomenta la oración por la misión y se invita especialmente a personas mayores y enfermos, porque esta será su manera de participar.
Se propone para octubre el rezo del Rosario en distintas modalidades: en la parroquia, en familia, por grupos pastorales, colegios, catequesis…. Algún día también en un espacio público que congregue movimientos, hermandades, cofradías de la Virgen…
Octubre misionero: llamar a todos los que van a ser «misioneros» para comenzar con ellos la preparación. Se trata de buscar las personas (y casas de acogida disponibles), que en distintos ámbitos van a invitar a la gente a participar en los encuentros de grupos.
Noviembre: formación de los misioneros y programación de los encuentros.
Adviento y Navidad: tiempo de la salida al encuentro
Envío de misioneros, para salir a todos los lugares e ir invitando personalmente a participar en los encuentros.
Durante este mes cada misionero irá creando un grupo de afinidad (vecinos, colegio, trabajo, jubilados, familias, jóvenes…).
Junto a la invitación personal, este es el tiempo de crear una red de comunicación para que suene en todas partes la misión.
8 de enero – febrero 2023: El tiempo del anuncio y la llamada a la conversión
El Domingo del Bautismo del Señor comienza propiamente la misión
Marzo – Abril 2023 : Cuaresma-Pascua: Tiempo de peregrinación y celebración
Durante este tiempo se invitará especialmente a las celebraciones del Triduo Pascual como lugar de encuentro privilegiado con el Señor
PEREGRINACIÓN JUBILAR
Peregrinaciones por Vicarías a la Basílica y Catedral para ganar la indulgencia y vivir el jubileo.
COLECTA DE CARIDAD
En la jornada jubilar se realizará una colecta para los proyectos sociales del Centenario.
Per fer-vos homenatge de pur i ver amor
Mayo 2023
- ACTO MARIANO
En todas las parroquias de la diócesis que congregue de manera popular a toda la población (ofrenda de flores, rosario, romería, oración mariana) y se promueva algún proyecto de caridad a nivel parroquial o arciprestal, como acción de gracias y clausura de la misión.
- CLAUSURA AÑO JUBILAR
Motivar la participación en los actos diocesanos de clausura del Año Jubilar Mariano del Centenario de la Coronación y en la Corona de Caridad
- OFERTA DE CONTINUIDAD
El Secretariado para el anuncio misionero de la parroquia y la Delegación de Iniciación Cristiana y Catecumenado podrá ofrecer un itinerario de primer anuncio y de iniciación a la fe de manera permanente para las parroquias. - 14 de mayo: FIESTA DE LA MARE DE DÉU. CLAUSURA DEL AÑO JUBILAR Y DE LA MISIÓN DIOCESANA
Preparación
DELEGACIÓN DEL CLERO Y ESPIRITUALIDAD: Material para retiro de sacerdotes sobre la misión. Oferta de Formación Permanente para el clero.
FACULTAD DE TEOLOGÍA: Simposio sobre la renovación de las parroquias en clave evangelizadora.
CÁTEDRA DE MISIONOLOGÍA: Material de formación sobre el Kerigma y primer anuncio.
DELEGACIÓN DE LITURGIA: Subsidio de materiales litúrgicos para la misión.
DELEGACIÓN DE CATEQUESIS Y SECRETARIADO PARA EL ANUNCIO MISIONERO: Material para las tres sesiones de anuncio en los grupos.
DELEGACIÓN PASTORAL DE LA SALUD Y MAYORES: Modelo de oración para dar a los enfermos y grupos de mayores.
VICARÍA DE CULTURA: Universidades y pastoral universitaria.
VICARÍA VIDA CONSAGRADA: Invitación a las monjas contemplativas a ofrecer oración por la misión.
La Misión diocesana se ha ido presentando a congregaciones, vida contemplativa, sacerdotes, y el pasado sábado, 18 de junio, al Consejo de Pastoral. El proyecto seguirá su difusión en arciprestazgos y parroquias. Para hacer sugerencias y aportaciones, enviar a:misiondiocesana@archivalencia.es