C.A. 9-11-2016
El párroco de San Nicolás y el director de la Ciudad de la Esperanza, con cinco acogidos A.SAIZ
S.O.S. de la Ciudad de la Esperanza (CIDES), en Aldaia, después de que el equipo de gobierno en el Ayuntamiento de Valencia haya decidido no seguir subvencionándola. Lejos de abandonar a su suerte al centenar de acogidos, CIDES inicia una campaña de apadrinamientos dirigida a parroquias y entidades ante la falta de ayudas públicas.
“Nos encontramos en una situación grave de falta de apoyos económicos”, según el presidente-director de CIDES, Vicente Aparicio, que cifra en 400 euros el apadrinamiento mensual por cada acogido para los servicios que le presta CIDES: alojamiento y manutención, asesoramiento jurídico, asesoramiento laboral, intervención socio-educativa así como asesoramiento en tramitación de prestaciones y subsidios, y renovación de documentación, entre otros.
“Buscaremos medios y fórmulas para que esto se haga realidad siempre y que cualquier persona que no tenga hogar aquí tenga su casa”, asegura.
La parroquia de San Nicolás de Valencia, ha sido la primera en acudir a la llamada del P. Aparicio. La popularmente conocida como la ‘Capilla sixtina valenciana’ tras la reciente restauración de sus frescos barrocos, ha creado la Obra Social de San Nicolás para la atención y ayuda de personas excluidas y necesitadas y su primera acción será becar mensualmente  a cinco personas sin hogar durante un año en CIDES.
Aparicio también recordó “la esperanza e ilusión del arzobispo de Valencia, que tiene mucho interés en este trabajo social”, que también cuenta con el apoyo de la UCV, entre otras entidades.

127 personas atendidas

La Ciudad de la Esperanza tiene una capacidad para 180 personas, de las que 127  están cubiertas en la actualidad, y cuenta con una superficie de 110.000 m2. Sus instalaciones comprenden 30 viviendas para 6 personas cada una, comedor, cocina, cafetería, salón de actos con un aforo de 350 plazas, aulas, salas de terapia, biblioteca, consultorio médico, policlínica, enfermería, capilla, diversos locales para prácticas, lavandería, ropero, gimnasio, zonas deportivas y amplias zonas ajardinadas.
El acuerdo con la Obra Social San Nicolás también contempla la organización de conciertos y actos culturales benéficos por parte de la parroquia destinados a recoger fondos  así como campañas de sensibilización para que sus feligreses aporten también su contribución y puedan colaborar en esta obra social. Se realizará a través de dípticos y folletos preparados por la parroquia.
Por su parte, los responsables de CIDES explicarán a los fieles y devotos de San Nicolás  su trabajo y su actividad.
El párroco de San Nicolás, Antonio Corbí, destacó tras la firma del convenio en las instalaciones de CIDES que “después de la restauración de los frescos era necesario que quedara más clara la ayuda que la parroquia presta siguiendo el espíritu de su titular, San Nicolás, protector de las personas en situación de debilidad”. Así, “el inicio de la obra social es una restauración de la feligresía que responde a la inquietud social de su titular para ayudar a los más necesitados”.
En este sentido, pretende la recuperación social e individual de personas excluidas y vulnerables. La obra proyecta la firma de otros dos convenios, uno con la Obra Social Femenina Ntra. Sra. de los Desamparados para ayudar a mujeres en riesgo de exclusión y, otro, con Cáritas Diocesana para contribuir en un programa de atención a niños en situación de riesgo.