El Papa ha autorizado el decreto sobre el martirio del siervo de Dios Óscar Arnulfo Romero Galdámez, quien fue arzobispo de San Salvador. Monseñor Romero nació el 15 de agosto de 1917 en Ciudad Barrios (El Salvador) y fue asesinado por odio a la fe el 24 de marzo de 1980, en San Salvador.
Recientemente, en el vuelo de regreso de Manila a Roma, durante la rueda de prensa Francisco confirmó que no sería él quien presidiera la beatificación de este mártir. “¡Allí habrá guerra entre el cardenal Amato y monseñor Paglia!”, bromeó. Para responder a la pregunta sobre quién de los dos haría la beatificación, Francisco aseguró que no sería él personalmente, y recordó que “para los beatos normalmente la celebra el cardenal del dicasterio u otro”.
El cardenal Angelo Amato es el prefecto de la Congregación de las Causas de los Santos y monseñor Vincenzo Paglia, presidente del Pontificio Consejo para la Familia, es el postulador de la causa de canonización de monseñor Romero.
También en la rueda de prensa de regreso de Corea en agosto de 2014, Francisco respondió a una pregunta sobre la situación por aquel entonces del proceso de beatificación de Romero. En dicha ocasión, el Santo Padre afirmó que “el proceso se encontraba en la Congregación para la Doctrina de la Fe, bloqueado ‘por prudencia’ según decían. Ahora ya no está bloqueado. Ha pasado a la Congregación para los Santos. Y sigue el camino normal de cualquier proceso. Depende de cómo se muevan los postuladores. Es muy importante que lo hagan con rapidez. Lo que a mí me gustaría es que se esclarezca: si se da martirio ‘in odium fidei’, por haber confesado a Cristo o por haber hecho las obras que Jesús nos manda para con el prójimo. Y esto tienen que hacerlo los teólogos, que lo están estudiando.
Porque detrás de él [Romero], vienen Rutilio Grande y otros; hay otros que fueron asesinados, aunque no están a la altura de Romero. Hay que distinguir teológicamente esto. Para mí Romero es un hombre de Dios, pero hay que hacer el proceso, y el Señor tiene también que dar su señal… Si quiere, lo hará. Pero ahora los postuladores tienen que ponerse en marcha porque ya no hay impedimentos”.
Monseñor Óscar Arnulfo Romero, arzobispo de San Salvador, fue muy conocido por su predicación en defensa de los derechos humanos y murió asesinado mientras celebraba misa. En 1994, la causa para su canonización fue abierta por su sucesor, Arturo Rivera y Damas.
La autorización del decreto de martirio la ha dado el Papa en audiencia privada con el prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, el cardenal Angelo Amato. Con esa medida, monseñor Óscar Romero será declarado próximamente beato, en un fecha todavía por determinar.