EVA ALCAYDE |6-03-20|

Joven, de sonrisa abierta y simpática, y valenciana de adopción, Lucía González-Barandiarián se acaba de meter a los obispos españoles en el bolsillo. La CEE le ha premiado por su trayectoria de 13 años trayendo aire fresco a la industria del cine.

Cuando la periodista Lucía González-Barandiarán trabajaba en los medios de comunicación de la diócesis de Valencia -en la Agencia de Noticias AVAN- no sabía lo que eran los Premios ¡Bravo!, esos que concede anualmente la Conferencia Episcopal Española a aquellos profesionales de la comunicación que se distinguen por promover a la dignidad del hombre, los derechos humanos y los valores evangélicos.
En aquel entonces, tampoco sabía que San Juan Bosco era el patrón del cine. Ni mucho menos podía imaginar que años después tendría su propia distribuidora de cine. Ni tampoco, por supuesto, que ésta se llamaría Bosco Films.
Pero todo esto ha pasado y la casualidad, el destino, la providencia, o el jurado, han querido que Lucía González-Barandiarán haya recibido este año el Premio ¡Bravo! de Cine, un galardón que reconoce su trayectoria, de 13 años ya, en la distribución del cine de inspiración cristiana.
Lucía ha recibido el premio de la CEE “con mucha ilusión”, especialmente porque ha compartido edición con personajes de la talla de José María Carrascal (Especial), Jesús Calleja (TV) o Fernado Salaverri (Música). “Me he sentido como en casa. Este premio es un empujoncito para mi trabajo, para seguir adelante, sobre todo cuando me entran dudas, y la verdad es que lo agradezco”, asegura la joven que entró en el mundo del cine casi por casualidad.

Lucía recogiendo el premio !Bravo¡ de cine 2019.


Después de pasar por la Agencia AVAN, con un perfil de periodista sólido, trabajó en otra agencia de noticias en Roma. Allí coincidió con otros compañeros de profesión de diferentes países y entabló amistad con una joven norteamericana.
“Esta chica, que trabajaba en una productora en Los Ángeles, me escribió y me ofreció irme para allá. Acepté con el propósito de perfeccionar mi inglés, pero lo que pasó fue que todos los compañeros del piso, trabajaban en la misma productora, ‘Metanoia Films’, y era católica”, cuenta Lucía que allí entendió el poder tan grande que tenía el cine para comunicar.
“Me ofrecí para ayudar como voluntaria en el área de comunicación en español y luego conseguí una beca. De vuelta en España, ‘Bella’, protagonizada y producida por el actor Eduardo Verástegui, fue la primera película en la que trabajé en el departamento de comunicación y marketing y en la distribución”, explica Lucia que considera el cine como “medio buenísimo para evangelizar”. “En el Vaticano el cine forma parte del área de comunicación”, asegura.
Bosco Films
Lucía se dio cuenta de que ella quería contar historias como la de ‘Bella’. Historias reales, de “super héroes de verdad, de carne y hueso” que merecen la pena ser contadas, “porque son un instrumento y ejemplo para mucha gente”. Así que acabó creando su propia distribuidora, en 2017, y le puso el nombre de Bosco Films. Su idea, aportar aire fresco a la industria del cine.
Para ella, el estado de salud del cine católico y el cine de valores en general no sólo es bueno, sino que va en aumento. “No hay mejor historia y guión que la Biblia”, dice con rotundidad. Opina, por ejemplo, que ‘La pasión’, de Mel Gibson marcó un punto de inflexión.
“No era nada comercial, extremadamente violenta, con violencia explícita, en una lengua difícil como el arameo… era una propuesta muy arriesgada, pero triunfó y se convirtió en una de las películas más taquilleras. Se demostró que había interés por este tipo de cine”, dice Lucía que, sin embargo, no cree que un fenómeno así vuelva a repetirse… “a no ser que sea con la película ‘Resurrección’ en el 2021”, se atreve a adelantar.
Este buen estado de salud del cine religioso y de valores, lo atribuye Lucia a que “el hombre está en búsqueda” y por eso le atraen películas que cuentan historias inspiradoras, que dejan huella y con mensajes profundos, historias que tocan el corazón”.
“Al principio el cine era propaganda, un instrumento. Luego fue considerado como el séptimo arte y hoy se rige por los patrones de la industria. En Bosco Films tratamos que en nuestras películas se den los tres ámbitos y eso es un reto”, explica Lucía que asegura que “el cine católico, con valores y trasfondo espiritual, funciona”.
Por eso cada vez hay mejores películas y mejores producciones. Y eso ocurre porque la gente acude al cine a verlas. “Las familias tienen una gran responsabilidad en lo que ven sus hijos, en los mensajes que reciben, y se necesita el apoyo del público”.
Con su trabajo de agencia en campañas de marketing y comunicación, Lucía ha llevado películas como ‘Converso’, ‘Red de Libertad’, ‘Ganar al viento’, ‘El Papa Francisco, un hombre de palabra’, o ‘Corazones Ardientes’, que se estrenó el pasado 21 de febrero. Entre manos también lleva ‘Las letras de Jordi’, sobre el santuario de Lourdes o ‘Corre como una chica’, que se estrenará el próximo mes de abril, y es una historia de superación y perseverancia, “donde se ensalzan valores como la familia, la unidad, la oración, el esfuerzo o la renuncia”.
En cuanto a distribución, Bosco Films ha trabajado con películas como ‘Contemplación’, ‘La Isla de los monjes’, ‘La canción de nuestra vida’, o la más reciente ‘Eter’ . El próximo estreno, previsto para el verano, será ‘Loud Krazy Love’, que cuenta la historia de conversión de un músico de heavy metal.