EVA ALCAYDE | 26-01-2018
El 60% de las mujeres atendidas en el Hospital de Lepra de Calcuta había tratado de ocultar su enfermedad antes del diagnóstico.
Las mujeres y las niñas afectadas por la lepra son invisibles, sobre todo en lugares como la India, donde aún prevalece esta enfermedad.
Las estadísticas oficiales sobre los casos detectados así lo demuestran, ya que de 214.783 casos nuevos en 2016, solo 84.202 fueron mujeres y niñas. No es que las mujeres enfermen menos, sino que no acuden al médico, por miedo a ser señaladas y rechazadas, por miedo a los estigmas de la lepra.
De hecho, las consecuencias sociales de la enfermedad, como el aislamiento, el abandono y extrema pobreza, no hacen más que acrecentar el problema de estas mujeres, que se vuelven todavía más vulnerables.
Por eso, la asociación valenciana Fontilles, que es un referente español en la lucha contra la lepra y otras enfermedades olvidadas vinculadas a la pobreza, ha lanzado una campaña con motivo del Día Mundial contra la Lepra, que se celebra este domingo, día 28, para tratar de llegar a estas mujeres y, sobre todo de llegar a tiempo.
“Mujeres y hombres sufren la lepra por igual, pero en el caso de las mujeres, en los países en desarrollo las desigualdades de género imposibilitan un diagnóstico temprano y una correcta atención médica”, explica Juan Lorca, presidente de Fontilles, que señalan el matrimonio precoz, el confinamiento en el hogar, las tareas domésticas y la falta de acceso a la educación, como las principales causas que reducen la participación de la mujer en la socidad.
“En la mayoría de los casos, el temor al rechazo de la familia y de la comunidad provoca que ignoren y oculten sus síntomas, lo que tiene como consecuencia un círculo vicioso de invisibilización, aislamiento, abandono y pobreza ”, lamentan desde Fontilles.
De hecho, según un estudio realizado en el Hospital de Lepra de Calcuta (India), el 93% de las mujeres atendidas presentaban ya algún tipo de discapacidad en el momento del diagnóstico, y el 60% había intentado ocultar la enfermedad en su comunidad.
Por eso, todos los fondos que la asociación valenciana de lucha contra la lepra obtenga con esta campaña, que lleva por lema “Llegar a ellas. Llegar a tiempo”, se destinarán a revertir esta invisibilidad, mediante acciones de diagnóstico, educación, formación profesional, capacitación y concesión de microcréditos.
La campaña, que cuenta con la colaboración de la Generalitat Valenciana, sensibilizará sobre la incidencia de la lepra en mujeres y niñas y sobre sus consecuencias, a través de mesas informativas en Metro-Valencia (en la estación de Xàtiva, junto a la oficina de atención al cliente) y en la Estación del Norte, del marte 23 al viernes 26, de 10h. a 14horas.
En la estación de trenes también estará el personal de Fontilles el domingo 28 de enero con mesas informativas y animación, y del 29 al 2 de febrero en horario de 10 a 14h.
Además, la campaña de Fontilles se visibilizará con una pancarta que colgará desde el balcón del Ayuntamiento de Valencia el lunes 29 y el martes 30, así como con una e iluminación nocturna especial.
Una exposición sobre la arquitectura del Sanatorio
La Estación del Norte de Valencia acoge, hasta el próximo 7 de febrero, una exposición sobre la arquitectura y el paisaje del sanatorio San Francisco de Borja, fundado en 1909 en la Vall de Laguar (Alicante).
La exposición presenta los resultados de un proyecto de investigación desarrollado por el Instituto de Restauración del Patrimonio de la Universitat Politècnica de València, con financiación del Ministerio de Economía, Industria y Competitividad.
A través de fotografías y planos, se muestra la arquitectura de los diferentes edificios que componen el complejo sociosanitario. Según el responsable científico del proyecto de investigación, Jorge Llopis, su valor reside en que “es el testimonio edificado de una forma de vida, la del aislamiento debido a la enfermedad y la de la lucha médica contra la misma”.
Fundado en 1909 por Joaquín Ballester y el jesuita Carlos Ferris, el sanatorio sigue existiendo en la actualidad, habiéndose convertido en el centro nacional de referencia en lepra. Acoge a 26 residentes y da tratamiento ambulatorio a 17 pacientes.

Lea los testimonios de atendidas por Fontilles en la edición impresa de PARAULA