REDACCIÓN | 28.01.2021
La Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos, en un año marcado por la pandemia, concluyó en la diócesis de Valencia con una celebración ecuménica que tuvo lugar en el Seminario Mayor La Inmaculada, en Moncada, y que contó con la participación del obispo auxiliar de Valencia monseñor Javier Salinas.
En la celebración ecuménica predicó el pastor Manuel Sarrías, Secretario General Emérito de la Unión Evangélica Bautista de España (UEBE) y Vicepresidente de la Federación de Entidades Religiosas Evangélicas de España (FEREDE). Con este acto concluyó la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos que se celebró en la diócesis de Valencia desde el pasado lunes, 18 de enero, con el lema ‘Permaneced en mi amor y daréis fruto en abundancia’.
Debido a la pandemia, este año fueron organizados menos actos dentro de la Semana de Oración, cuya inauguración tuvo lugar en la Facultad de Teología San Vicente Ferrer con una mesa redonda con la que, además, se conmemoró el 25 aniversario de la Carta Apostólica ‘Orientale lumen’ del papa san Juan Pablo II.
Lux in Via
Dentro de los actos que se han celebrado esta semana, la Iglesia del convento de Santa Clara de Valencia, regido por las religiosas Clarisas Capuchinas acogió, el oficio ecuménico ‘Lux in Via’. En el acto, organizado por el Oratori de Sant Felip Neri y la Asociación Ecuménica Internacional (IEF), el pastor evangélico Peter Austin, fue el encargado de realizar la predicación de este año.
De igual manera, la Basílica de San Vicente Ferrer regida por los dominicos celebró una oración ecuménica que contó con la predicación del pastor Pau Grau, de la Iglesia Bautista.
San Vicente Mártir
Dentro de esta semana de oración ecuménica, la figura de san Vicente Mártir también cobra especial relevancia. De este modo, la Iglesia de Santa Catalina de Valencia acogió la celebración de una misa en rito hispánico.
La misa hispánica de la Semana de Oración “tradicionalmente tiene lugar en la capilla-cárcel de San Vicente Mártir, en la calle Cárcel de San Vicente, pero este año, por la pandemia y las medidas establecidas, decidimos trasladarla a Santa Catalina”, indicó August Monzón, director espiritual del Oratori de Sant Felip Neri, una de las entidades organizadoras de los actos.
La misa fue oficiada en valenciano y con algunas partes en latín, por el propio August Monzón y concelebrada por Jordi Miquel, sacerdote adscrito a Santo Tomás Apóstol y San Felipe Neri.
La música de esta misa, en su mayor parte, es una adaptación de melodía mozárabe compuesta por Ricard Sarrió Camarasa.
Además, durante la celebración de la misa estuvo expuesto, en el presbiterio, para su veneración, el icono bizantino con elementos valencianos de San Vicente Mártir, bendecido hace ahora un año en el Oratori, junto con los guiones, es decir, estandartes o pendones, de Santa Catalina y del propio diácono.
En esta semana que transcurre entre la fiesta de San Pedro y la de San Pablo, participaronn la delegación diocesana de Relaciones Interconfesionales del Arzobispado, el Centro Ecuménico Interconfesional de Valencia (CEIV), el Oratori de Sant Felip Neri, la Cátedra Congar, la Asociación Ecuménica Internacional (IEF) y las confesiones cristianas presentes en la diócesis.
