Ante 1.100 personas voluntarias de la entidad, Cáritas diocesana de Valencia presentó las líneas de actuación de la institución para los próximos cuatros años, a través de su nuevo Plan Estratégico 2023-2026. Con el lema ‘Abriendo caminos de esperanza’ Cáritas Valencia celebró su V Encuentro Diocesano.

De izquierda a derecha, Ignacio Grande, director de Cáritas Diocesana; Arturo Ros, obispo auxiliar y Enrique Benavent, arzobispo de Valencia. FOTO: A.SAIZ.

❐ O.P. / A.C. | 08.06.2023
Cáritas Valencia celebró el V Encuentro Diocesano en el que participaron más de 1.100 personas voluntarias con el lema ‘Abriendo caminos de esperanza’, en el que se presentaron las líneas de actuación de la institución a través de su nuevo Plan Estratégico 2023-2026, en un día de encuentro y convivencia en las Escuelas San José – Jesuitas.

El director de Caritas Valencia, Ignacio Grande, agradeció a todo el voluntariado su tarea, animándolo a “que nunca nos cansemos de amar. Gracias porque asumís personas con problemas y no sólo los problemas de las personas. Hemos de darnos la mano porque entre ser y no ser, siempre elegimos ser. Frente al individualismo, necesitamos la comunidad, y muy especialmente necesitamos la comunión eclesial”, afirmó.

Por su parte, la secretaria general de Cáritas Española, Natalia Peiro, recordó que “sólo se pueden enjugar las lágrimas de los que sufren si lloramos con ellos”.

‘Un Plan con alma’
El arzobispo de Valencia, Mons. Enrique Benavent afirmó “vivo como un regalo este V Encuentro en los primeros meses de mi ministerio en la diócesis de Valencia, con agradecimiento porque sembráis mucha esperanza a través de tantas personas voluntarias en cada Cáritas parroquial, en cada localidad de la diócesis… Mi agradecimiento a la ilusión que ponéis en vuestro compromiso, gracias a la alegría en vuestro compromiso el mundo es mejor. El que trabaja se compromete a no cansarse de anunciar el Reino de Dios. El testimonio del amor sólo se puede dar amando”.

Respecto al Plan Estratégico de Cáritas, señaló que “lo que debe caracterizar es un Plan con alma, ese es el estilo de Cáritas. Un Plan con vida interior que debe tener en cuenta cómo vamos a acompañar a las personas que están en el centro. No solo hacemos cosas, acompañamos personas”.

El encuentro diocesano se celebró en el salón de actos de las Escuelas San José de Valencia con la presencia de 1.100 voluntarios. FOTO: A.SAIZ

Denuncia, innovación y responsabilidad de empresas e instituciones
Ignacio Grande presentó a la filósofa Adela Cortina, que impartió la ponencia central con el título ‘Llamados a ejercer la compasión desde el compromiso’, en la que la escritora aseguró que “nos hacen falta nuestros semejantes, somos carne de la misma carne y sangre de la misma sangre. Cuando nos encontramos con el sufrimiento ajeno, la empatía se queda corta si no va acompañada del compromiso. Hay que ser prójimos en el sentido de aproximarse. La compasión ha de ser el centro de todo, de la política, de la economía, de las entidades que colaboran con organizaciones solidarias, hay que innovar y deberíais escribir la historia de toda la innovación social que habéis realizado a lo largo de los años”.

Adela Cortina también reivindicó que “hay que denunciar las injusticias. Vivimos en la sociedad del intercambio, hay quienes parece que no tienen nada que intercambiar, por eso son excluidos, de ahí que tengamos que contemplar cuál es su valor, que lo tiene, porque hay necesidades humanas que nunca pueden reclamarse como derecho ni satisfacerse como deber, sino que son dones del corazón y bienes de gratuidad. Eso es la compasión”.

La autora, que fue reconocida con una aclamación, finalizó proclamando: “Bienaventurados quienes trabajan por la esperanza porque nos dan razones para esperar”.

En cuanto a la segunda parte del V Encuentro Diocesano, la secretaria general de Cáritas Valencia, Aurora Aranda, introdujo las principales líneas del Plan estratégico de Cáritas diocesana y coordinó las intervenciones de expertos invitados a Valencia y relacionados con las líneas de personas acompañadas, la creación de comunidades acogedoras, el cuidado de la Casa Común y la sensibilización social. Aurora Aranda aludió a la importancia de “soñar juntos, tal como nos invita el papa Francisco a hacer: somos parte de la Cáritas que queremos para el futuro», afirmó.

Del Instituto de Derechos Humanos de la Universitat de València, Albert Mora, señaló que “los derechos humanos o son completos o no son. Podemos poner muchos adjetivos a las personas que dicen que los otros no nos gustan, la tolerancia es una palabra que queda muy lejos de lo deseable que es aceptar y acoger, como sí lo hacéis en Cáritas” y animó a los agentes a seguir siendo «transformación que acompañe a las personas en el acceso a derechos» y a seguir «siendo pedagogos de tantas personas con las que tenemos relación sobre la garantía de derechos».

Por su parte, Vicent Martín, delegado episcopal de Cáritas Española, recordó las palabras del Papa Francisco “tenemos que ser parte activa en una sociedad herida como la nuestra”, y señaló que “Caritas no es una ONG, pero tampoco puede existir una comunidad cristiana sin la dimensión caritativa-social, de salir al encuentro de los vulnerables”. Destacó que “es importante que trabajemos en red, con una corresponsabilidad compartida de los laicos que también necesitamos el abrazo de nuestros pastores”. Y por último recordó las ‘C’ que caracterizan a Cáritas: cuidados, compasión y comunidad.

Juanjo López, miembro del Equipo de Desarrollo Institucional de Cáritas Española, apuntó retos claves afirmando que “es una tarea de todos los cristianos hacer comunidad, porque nadie se salva solo. Acompañarnos con los pobres, ser iglesia abierta. El cambio viene de la sencillez y la humildad. También tenemos una sociedad que está buscando espiritualidad en sus vidas y debemos dar respuesta a esta necesidad. Y construir juntos, de manera horizontal, entre todos, y no sólo desde arriba”.

Por su parte, Vicent Roig, biólogo y educador social, apuntó propuestas en la línea de la Encíclica Laudato si’ del papa Francisco y el cuidado de la Casa Común, advirtiendo de que “los recursos son limitados. La uniformidad genera desequilibrios y el poder se concentra en pocas manos. Por ello, deberíamos ir a un ‘decrecimiento justo’, y mantener la Casa Común, porque somos cuidadores de jardín del Reino y tenemos obligación de cuidarlo y transmitirlo.

El Encuentro finalizó con la celebración de la eucaristía presidida por el arzobispo de Valencia, Enrique Benavent y concelebrada con una veintena de sacerdotes y vicarios episcopales de la diócesis de Valencia que estuvieron presentes en todo el Encuentro.

El V Encuentro Diocesano de Caritas Valencia, con la colaboración de “empresas con corazón” como Caixa Popular, comenzó con la Oración por el músico y maestro Fran Ros y el grupo Assisi producciones, y finalizó con el Gesto de Clausura, pronunciado por Noèlia Alonso, en el que los jóvenes portaron un simbólico enorme camino, para ir abriendo caminos de esperanza.