El brazo de San Vicente Mártir, portado por el Caballero Jurado D. Sebastiá Iglesias, es subido al buque de la Armada Española «Sarmiento de Gamboa» en el Puerto de Sagunto para ser trasladado a Valencia. 17 de octubre de 1970

BELÉN NAVA | 17.01.2020

Este año se cumplen las bodas de oro de la llegada de una de las reliquias más veneradas en la catedral de Valencia. El brazo incorrupto de san Vicente Mártir viajó desde Padua hasta Valencia a bordo de la fragata ‘Sarmiento de Gamboa’ y fue recibida con todos los honores. El erudito italiano Pietro Zampieri, poseedor desde el año 1948 de la reliquia, fue quien la donó a la dió­cesis. Fueron necesarios dos años de investigaciones para otorgar la autenticidad canónica e histórica a la reliquia.

El 22 de enero de 1970, ahora hace 50 años, se firmó el documento de donación de la reliquia de san Vicente Mártir a la diócesis de Valencia. Se trataba del brazo izquierdo del mártir que el erudito italiano, el Dr. Pietro Zampieri, tenía en su poder y deseaba regalar a Valencia.

Pero retrocedamos unos cuantos años, hasta 1966, momento en el que el doctor Zampieri viajó a Valencia para ofrecer al Cabildo Metropolitano y al entonces arzobispo, Mons. Olaechea, la reliquia del santo.

En ese momento la diócesis se encontraba en sede vacante puesto que don Marcelino, había cumplido 75 años y había presentado su renuncia, aceptada por el papa Pablo VI el 19 de noviembre de 1966. Puesto que el donante aportaba, además, poca documentación, el asunto quedó postergado durante un periodo de tiempo.

Posteriormente, “el Dr. Zampieri insistió en su ofrecimiento, esta vez ante el Vicario Capitular D. Rafael González Moralejo, sin que se lograra una aceptación por parte del Palacio Arzobispal, dado que no se disponía de las acreditaciones técnicas suficientes como para dar total fiabilidad a una reliquia que Valencia desconocía hasta ese momento y, consiguientemente, para hacer un reconocimiento canónico de su existencia, asunto de evidente trascendencia y honda responsabilidad para la Iglesia valentina del momento”, explica el vicedecano de la Real Academia de Cultura Valenciana, José F. Ballester Olmos.

Sin embargo, el Dr. Zampieri no quiso volver a Italia sin consolidar su oferta y se dirigió al ayuntamiento, donde fue recibido por el alcalde Rincón de Arellano y Juan Bautista Martí Belda, en aquel momento Lloctinent General del Capítulo de Caballeros Jurados de San Vicente Ferrer.
A don Pietro se le pidió, entonces, que fundamentara documental y técnicamente la autenticidad de la reliquia, criterio que compartió con el sacerdote Vicente Castell Maiques, a quien el Arzobispado delegó para el seguimiento del asunto.

En 1968, distintos exámenes de la reliquia realizados en el Instituto de Cirugía Plástica de la Universidad de Padua arrojaron resultados “positivos y concordes entre sí y con el relato de la pasión y martirio del santo, escrita en el mismo siglo de su muerte”, según informó entonces el Arzobispado a través de su boletín oficial. En la investigación intervino un grupo de forenses, catedráticos de universidades italianas, médicos, sacerdotes y diversos expertos. Los estudios del brazo con­firmaron, entre otros extremos, que “carece de dedo pul­gar y que la piel que recubre el brazo aparece de color ma­rrón oscuro, por probable carbonización”.

Llegada a Valencia
En octubre de 1970, un buque llevaba hasta Padua al Lloctinent General y a los Caballeros Jurados Vicente Castell, Luis Sanchis, Vicente Marín y otros. En Padua fueron recibidos por el Dr. Zampieri y se realizó el acto de entrega del brazo del mártir. “Desde Barcelona hasta el Puerto de Sagunto la reliquia viajó portada por el canónigo y Caballero capitular Vicente Castell en el coche del Caballero Jurado Ramón Sebastiá, pero al llegar al puerto saguntino fue criterio del Dr. Castell y del Sr. Sebastiá que en beneficio de la seguridad de la reliquia era más conveniente llevarla a Valencia, donde pasó la noche celosamente guardada y vigilada en el domicilio de don Ramón Sebastiá”, comenta Ballester Olmos. El 17 de octubre, ambos, acompañados por el también miembro del Capítulo General Luis Gascó, se trasladaron al Puerto de Sagunto, donde Ramón Sebastiá subió la reliquia a la fragata española ‘Sarmiento de Gamboa’ y fue colocada en una cámara del buque, donde fue custodiada y venerada por el Lloctinent General Martí Belda, los Caballeros Ju­rados, autoridades presentes y toda la dotación del buque, que antes de zarpar desfiló ante la urna que contenía el brazo de san Vicente.

La reliquia del mártir fue recibida oficialmente en la Catedral de Valencia, donde tuvo lugar un acto de acción de gracias por el retorno de la reliquia. Entre los actos organizados con motivo de la recepción de la reliquia, Zampieri recibió como agradecimiento, el nombramiento de hijo adoptivo de la ciudad de Valencia.

Relicario de plata que contiene el brazo momificado del santo. (Foto: M. Guallart).

El 18 de octubre de 1970, el arzobispo García Lahiguera presidió una misa concelebrada en la Seo tras la cual el brazo fue llevado a la capilla-cárcel de san Vicente y a la Basílica de los Desamparados, antes de quedar definitivamente instalado en una urna de cristal, obra del artista veneciano Giancarlo Fecchio, en la capilla que el patrón de Valencia tiene dedicada en la Catedral.

Programa de actos en honor de san Vicente

Sábado 18

  • 08:45h. Ruta ecuménica por los lugares vicentinos. Transcurre por diez estaciones, desde la parroquia del Salvador y Santa Mónica hasta la Basílica sepulcral de San Vicente mártir.
    La peregrinación recorrerá los lugares más significativos vinculados al santo: la columna en la que, según la tradición, el santo fue atado cuando fue llevado a Valencia desde Zaragoza para ser martirizado; la Catedral, donde podrá verse el brazo izquierdo del santo; las dos conocidas como “cárceles de San Vicente”, en la calle del mismo nombre y en la plaza de la Almoina; la parroquia valenciana de S. Vicente mártir, donde fue abandonado su cuerpo tras el martirio; así como la parroquia de Cristo Rey, donde el fue inicialmente sepultado.
  • 20h. Concierto para jóvenes ‘Al ritmo de Jesús’ con Unai Quirós. Cena de sobaquillo y vigilia en la cripta. Parroquia San Vicente mártir de Valencia (junto a plaza España).

Domingo 19

  • 11.30 h. Dançà por S.Vicente con la participación de las Falleras Mayores. C/Ermita
  • 12 h. Tras la misa, representación de los niños de la parroquia de la llegada de San Valero y San Vicente a Valencia. Parroquia Santa Mónica.

Martes 21

  • 18.30 h. Conferencia ‘San Vicente Mártir, patrono de la UCV, ¿Por qué? y ¿para qué?’, por Ramón Fita, delegado diocesano para la Causa de los Santos. Salón gótico del Palacio Arzobispal. Organizada por la UCV.
  • 19 h. Misa en rito hispano-mozárabe. Parroquia San Vicente mártir.
  • 19 h. Misa en rito mozárabe presidida por el Arzobispo. Capilla del Santo Cáliz de la Catedral. Organizada por la UCV.
    Miércoles 22
    Catedral de Valencia
  • 10:30h. Misa solemne presidida por el Arzobispo.
  • 12 h. Procesión, con la imagen del santo, por el recorrido habitual.

Parroquia de San Esteban

  • 12h. Procesión ‘dels bults’. A su término bautizo de un niño llamado Vicente.

Parroq. Cristo Rey (C/ San Vicente, 126)

  • 10h. Bendición y reparto de los panes de san Vicente.
  • 12h. Misa solemne en valenciano con la participación de la ‘Coral Universitaria Senior de Valencia’. Después ofrenda floral y dançà de los falleros por la zona.
  • 13:15h y 18.30 h.. Misas en honor del santo.
  • 20:00h. Misa en rito hispano mozárabe.

Parroquia de San Vicente (C/ Ermita,1) Permanecerá abierta de 9:30-14h. y de 17-21h.

  • 10 y 12h. Misas en honor de san Vicente.
  • 13h. Solemne eucaristía acompañada por el Coro ‘Lo Rat Pe­nat’. Reparto de panes ben­decidos. Al concluir, mascletà.
  • 19:30h. Misa solemne cantada. Posteriormente, concierto de la Coral Polifónica Valentina.

Cárcel de S. Vicente

  • 18:30h. Misa en rito hispánico en la cárcel del ‘pouet’, organizada por el Oratorio de S. Felip Neri y CEIV.

Parroquia San Valero y San Vicente (Pza. Barón de Cortés)

  • 19.30 h. Misa solemne con veneración de la reliquia.