Los jóvenes que acudieron al primer ‘Luces en la ciudad’ en el año 2004.


B. NAVA| 07-11-2013
Diez años pasan sin casi darnos cuenta. Y en la vida de los jóvenes esos diez años se notan…¡y mucho!, la vida va pasando poco a poco y llega un día en que recordamos el momento en que comenzó todo. El día en que ‘Luces en la ciudad’ se presentaba ante los jóvenes de la diócesis de Valencia, allá por el año 2004.

Esta es ya su décima edición y, cada año, cuando las luces se apagan y los jóvenes se van a su casa, comienza una nueva edición de ‘Luces’, comienza otro reto, cada vez más exigente. Es como una carrera de fondo, cuando se llega a la meta ya se está pensando en cuál va a ser la siguiente competición a la que acudir. Y ese es el expíritu de ‘Luces en la ciudad’, superarse año tras año y atraer a más jóvenes para que conozcan su luz interior. Una luz que siempre está presente en esta iniciativa, unas veces como metáfora de vida, otras como de guía…
La andadura de ‘Luces en la ciudad’ es larga. Hay que remontarse al año 2004 cuando, un grupo de agentes de pastoral (sacerdotes, religiosos, catequistas…) propusieron la creación de una actividad con el propósito de comunión por los jóvenes. Era la respuesta “ante una gran fragmentación de iniciativas en la pastoral juvenil de la diócesis de Valencia y los prejuicios entre algunas de ellas”, explican fuentes de la organización.
‘Luces en la ciudad’ era propuesta para los jóvenes que, a la vez que “les aporta -inciden- una experiencia espiritual de encuentro con Dios sirviera para crear un vínculo de trabajo y comunión entre los diferentes agentes de pastoral. Llamados a trabajar, unidos por una misma finalidad: Cristo”.
Los años han pasado y ‘Luces en la ciudad’ se ha convertido en una cita ineludible dentro de la agenda de los jóvenes de la diócesis. Para ellos es un punto de encuentro donde compartir creencias, sentimientos…unidos por una misma fe. Donde orar o permanecer en silencio. Donde gritar al mundo las injusticias y donde aportar su pequeño granito de arena para que los más desfavorecidos se sientan queridos a través de la caridad cristiana.
Gracias a esto “ha habido un crecimiento en la comunión de los agentes de pastoral y una madurez en la espiritualidad para el enriquecimiento en primer lugar de los jóvenes y también de todos los que formamos parte de esta actividad”.
Resultado de esto es la asistencia de los jóvenes a la actividad (celebrada anualmente en noviembre) cada vez más numerosa.
En el encuentro celebrado el año 2012 asistieron cerca de unos 900 adolescentes y jóvenes procedentes de colegios, movimientos, asociaciones, universidades y parroquias de la diócesis.
‘Luces en la ciudad’ “debe continuar proponiendo el encuentro anual que realiza para continuar defendiendo los objetivos propios con los que se formó; acercar a los jóvenes a Dios y crear comunión entre los agentes de pastoral”.