L.B. | 5-11-2015
Lectura, trabajo y oración
El actual monasterio, ocupado por nueve hermanas y una novicia, es un edifico sencillo y moderno rodeado de campos de naranjos en plena huerta de Benaguacil. Cuenta con iglesia, enfermería y hospedería, además de las instalaciones propias de la vida monacal, como habitaciones, comedor y claustro.
Su abadesa, la madre Encarnación Lluch Mendieta, de Valencia, explica que los tres pilares de la vida del císter son la ‘lectio divina’, la liturgia y el trabajo, actividades en las que distribuyen equilibradamente la jornada.
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